Atacadas con pintura ocho sedes del PNV en Vizcaya
Ocho batzoki (sedes sociales del PNV), en concreto los situados en los barrios bilbaínos de Deusto y Santutxu, y otros en las localidades vizcaínas de Getxo, Balmaseda, Gordexola, Larrabetzu, Galdames y Elorrio, amanecieron ayer cubiertos por pintura roja y amarilla o con pintadas insultantes. En dos de las sedes peneuvistas (las de Larrabetzu y Gordexola) el rostro de Juan María Atutxa había sido rodeado por una diana en los carteles colocados por EGI, la organización juvenil peneuvista, para mostrar su solidaridad con el ex presidente del Parlamento vasco por la condena que le acaba d...
Ocho batzoki (sedes sociales del PNV), en concreto los situados en los barrios bilbaínos de Deusto y Santutxu, y otros en las localidades vizcaínas de Getxo, Balmaseda, Gordexola, Larrabetzu, Galdames y Elorrio, amanecieron ayer cubiertos por pintura roja y amarilla o con pintadas insultantes. En dos de las sedes peneuvistas (las de Larrabetzu y Gordexola) el rostro de Juan María Atutxa había sido rodeado por una diana en los carteles colocados por EGI, la organización juvenil peneuvista, para mostrar su solidaridad con el ex presidente del Parlamento vasco por la condena que le acaba de imponer el Tribunal Supremo por no disolver el grupo parlamentario heredero de Batasuna.
En otras pintadas se acusaba de "traidores" y "torturadores" tanto al PNV como a los socialistas. En el de Getxo se lanzaron octavillas con el texto "PNV lotu zure txakurra. Zuek atxilotzen, torturatzen eta kartzelaratzen gaituzue" (PNV ata a tu perro. Vosotros nos detenéis, nos torturáis y nos encarceláis).
La ejecutiva vizcaína del PNV calificó los incidentes de "noche negra" en la que "de manera coordinada, un grupo de autoritarios se dedicó a boicotear" los batzoki. La dirección provincial peneuvista aseguró en un comunicado que los miembros de la izquierda radical, a quienes responsabilizó de los ataques, son "todo menos abertzales".
El PNV consideró especialmente graves las pintadas contra Atutxa, ex consejero vasco de Interior. "Piden apoyo y comprensión para ellos", señaló, "pero su forma de solidarizarse con los demás es la amenaza y la falta de respeto". Los partidos democráticos condenaron los hechos.