Un guardia civil se mata antes de ser detenido por pegar a su mujer

Juan Schiffino, un cabo de la Guardia Civil de 34 años, natural de Granada, que prestaba servicio en el Puesto de Ayamonte (Huelva) desde hacía año y medio, se disparó en la sien con su arma reglamentaria en la madrugada del pasado lunes, después de que su esposa, de 28 años, natural de Cuba, lo denunciara el domingo por malos tratos.

El cuerpo del agente fue hallado a las 14.30 del lunes por sus compañeros, que accedieron al domicilio con una orden judicial para detenerle.

Según fuentes policiales, el agente propinó una bofetada a su mujer, hecho que propició que ésta abandonara...

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Juan Schiffino, un cabo de la Guardia Civil de 34 años, natural de Granada, que prestaba servicio en el Puesto de Ayamonte (Huelva) desde hacía año y medio, se disparó en la sien con su arma reglamentaria en la madrugada del pasado lunes, después de que su esposa, de 28 años, natural de Cuba, lo denunciara el domingo por malos tratos.

El cuerpo del agente fue hallado a las 14.30 del lunes por sus compañeros, que accedieron al domicilio con una orden judicial para detenerle.

Según fuentes policiales, el agente propinó una bofetada a su mujer, hecho que propició que ésta abandonara el domicilio, ubicado en la calle de Amador Jiménez, número 17, junto a la hija de ambos, de dos años. La mujer telefoneó a las 19.00 al cuartel de Ayamonte, donde posteriormente fue atendida, al igual que la pequeña.

De manera inmediata, varios agentes se presentaron en el domicilio de la familia. El agente, a través de la puerta de su casa, afirmó que se negaba a acompañar a los guardias al cuartel. La escasa disposición a colaborar obligó a montar un dispositivo de vigilancia permanente ante el domicilio. La Policía Judicial de la Guardia Civil, al comprobar que el agente no respondía a las llamadas realizadas desde fuera, solicitó finalmente del Juzgado de Instrucción en funciones una orden de entrada.

A las 14.30, una vez concedido el permiso judicial, los agentes accedieron al piso mediante la fuerza y descubrieron al guardia ya cadáver en el suelo. Juan Schiffino fue incinerado ayer, después de practicarle la autopsia en Huelva.

Algunos vecinos del bloque en el que ocurrieron los hechos aseguraron ayer que las discusiones entre el matrimonio, que se había casado poco después de conocerse, eran frecuentes.

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