Dirigentes marroquíes aseguran que son el colectivo peor organizado de Cataluña

Responsables de organizaciones marroquíes entonaron ayer un mea culpa para reconocer que constituyen uno de los colectivos extranjeros peor organizados. Esta autocrítica fue hecha pública durante el primer congreso de asociaciones de Marruecos en Cataluña, celebrado durante el fin de semana en un salón del Ateneo Barcelonés. La asamblea había sido convocada por cuatro colectivos, con el apoyo de la Generalitat, el Ayuntamiento de Barcelona y el propio consulado de Rabat.

La convocatoria de este congreso tenía como objetivo poner orden en las filas del primer colectivo de inmigran...

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Responsables de organizaciones marroquíes entonaron ayer un mea culpa para reconocer que constituyen uno de los colectivos extranjeros peor organizados. Esta autocrítica fue hecha pública durante el primer congreso de asociaciones de Marruecos en Cataluña, celebrado durante el fin de semana en un salón del Ateneo Barcelonés. La asamblea había sido convocada por cuatro colectivos, con el apoyo de la Generalitat, el Ayuntamiento de Barcelona y el propio consulado de Rabat.

La convocatoria de este congreso tenía como objetivo poner orden en las filas del primer colectivo de inmigrantes de Cataluña, compuesto por más de 300.000 personas que han logrado, con su sola presencia, que el árabe o el beréber sea la tercera lengua más hablada después del catalán y el castellano.

La convocatoria del congreso fue desoída por un sector importante de las asociaciones marroquíes, que acusan a los organizadores de actuar al dictado de la Administración de Rabat y del consulado. A pesar de estas acusaciones, los organizadores se han visto desamparados por la propia Administración rabatí, que a última hora decidió anular por diferentes razones la presencia en los actos. Mohamed Ameur, el ministro delegado encargado de los residentes en el extranjero, y Nourdine Califa, el cónsul general de Marruecos, anunciaron a última hora su ausencia. A estas dos deserciones se sumó la también la del representante del Ayuntamiento de Barcelona, lo cual provocó la suspensión de la sesión oficial de clausura, por falta de ponentes.

La celebración de este primer congreso coincide con la decisión del rey Mohamed VI de poner en pie un Consejo Superior de la Inmigración en Marruecos, en el que estén representados los diferentes colectivos del extranjero. Este consejo es el reconocimiento de una fuerza política, social y económica que asegura la primera entrada de divisas en el reino alauí y que frena los índices de paro en el interior del país.

Las polémicas internas no desanimaron ayer a los convocantes del congreso, que se comprometieron a celebrar una nueva asamblea antes de seis meses y que anunciaron que llevarán a cabo un censo de las asociaciones en Cataluña.

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