Temor a otra 'pantanada' por la suelta de agua de los embalses
Son días de aniversarios y todos ellos relacionados con avenidas y riadas catastróficas. En Valencia se cumplen 50 años de la gran riada del Turia, que inundó buena parte de la ciudad y pueblos del curso bajo del río con un balance oficial de 81 muertos. El río arrojó sobre Valencia un caudal máximo de hasta 4.000 metros cúbicos por segundo en la madrugada del día 13 de octubre y durante la jornada siguiente. También La Ribera se acerca a un aniversario trágico. El próximo 20 de octubre se cumplen los 25 años de la pantanada que anegó la comarca y causó ocho muertes. La rotura de la pre...
Son días de aniversarios y todos ellos relacionados con avenidas y riadas catastróficas. En Valencia se cumplen 50 años de la gran riada del Turia, que inundó buena parte de la ciudad y pueblos del curso bajo del río con un balance oficial de 81 muertos. El río arrojó sobre Valencia un caudal máximo de hasta 4.000 metros cúbicos por segundo en la madrugada del día 13 de octubre y durante la jornada siguiente. También La Ribera se acerca a un aniversario trágico. El próximo 20 de octubre se cumplen los 25 años de la pantanada que anegó la comarca y causó ocho muertes. La rotura de la presa de Tous al no funcionar la apertura de las compuertas de los aliviaderos agravó el temporal que azotaba a La Ribera. La masa de agua que escapó de la presa y la lluvia torrencial anegaron pueblos y campos. Cuando cae agua como ayer, no son pocos los habitantes de la zona que recuerdan el desastre y temen que la apertura de los aliviaderos de los embalses provoque inundaciones.
Según fuentes de la Delegación del Gobierno, ayer no fue necesario soltar agua en Tous, pero sí en los embalses de Bellús, en el río Albaida; en el de Beniarrés, ligado al Serpis, y en el pantano de Guadalest, alimentado por el río del mismo nombre en la Marina Baixa. Sólo se liberó agua para "mantener los niveles". Sin embargo, el caudal desembalsado en Bellús se sumó a la lluvia y al desbordamiento del barranco de Barxeta, lo que anegó las calles de la pedanía de Cogullada, en el término municipal de Carcaixent. Una parte de sus habitantes (en total unos 150) dejaron sus casas ante el peligro de que se inundaran, informa Xavier Espanya. En Carcaixent, los vecinos no esperaron a posibles crecidas y se formaron colas para sacar los coches del casco urbano y aparcarlos en zonas altas y en las urbanizaciones que están fuera del alcance de las avenidas. A última hora de la tarde, se desactivó la alarma lanzada por la Policía Local y Carcaixent respiró aliviada. Las inundaciones de 1982 y de 1987 siguen muy vivas en la memoria de La Ribera.
El meteorólogo Rafael Armengot recordaba ayer que en la zona de la Muela de Cortes la lluvia estimada durante la pantanada de 1982 alcanzó los 1.000 litros por metro cuadrado en 15 o 16 horas. El experto también rescató de las estadísticas otras cifras impactantes: en Xàbia llegaron a medirse el 2 de octubre de 1957 hasta 878 litros por metro cuadrado en un día, y en la zona de Gandia, 883 en 12 horas en noviembre de 1987. También se superaron los 500 litros en el entorno de Barx en septiembre de 1996, y marcaron registros muy destacables temporales del otoño en 1989 y 2000. El meteorólogo estimó que esta gota fría se situará "a mitad de camino" entre los grandes temporales históricos y las trombas puntuales.