Battiato, Hombres G, Chano Domínguez, Crowed House...
De la banalidad de la música de Hombres G a la de grandeza intensa de Franco Battiato, Madrid vuelve a mostrarse ecléctico, dispuesto a acoger todo tipo de expresiones melódicas. Lo ha hecho esta pasada madrugada del domingo en blanco y afronta ahora una semana de resaca en la que destacan las tres noches que el pianista Chano Domínguez va a pasar en Clamores para grabar un disco en directo, o para recibir de nuevo a Crowed House, tras unos años inactivos.
- Sublimes. No venía por Madrid desde que cerró Pozuelo Escénica, en el verano de 2003, así que hay ganas tremendas de volver a ver...
De la banalidad de la música de Hombres G a la de grandeza intensa de Franco Battiato, Madrid vuelve a mostrarse ecléctico, dispuesto a acoger todo tipo de expresiones melódicas. Lo ha hecho esta pasada madrugada del domingo en blanco y afronta ahora una semana de resaca en la que destacan las tres noches que el pianista Chano Domínguez va a pasar en Clamores para grabar un disco en directo, o para recibir de nuevo a Crowed House, tras unos años inactivos.
- Sublimes. No venía por Madrid desde que cerró Pozuelo Escénica, en el verano de 2003, así que hay ganas tremendas de volver a ver al siciliano Franco Battiato. Este sublime artista es capaz de juntar todas las sonoridades del Mediterráneo en una sola. No importa que la raíz sea árabe, balcánica o latina. Que se sitúen más a oriente u occidente, al norte o al sur, sus canciones son únicas y personales. Viajes únicos y emocionantes envueltos en un pop que convive con el rock, lo progresivo, el jazz o la fusión y crea un género nuevo que sólo él es capaz de reproducir. En una palabra, Battiato es un genio. En los ochenta, traspasando sus canciones al castellano (Centro de gravedad permanente, Cucurrucucú, Quiero verte danzar, La estación de los amores...), triunfó sobradamente en España, pero en los últimos años su popularidad no es tan enorme. Aun así conserva un grupo fiel de incondicionales que devoran sus discos, aunque ya no escalen los primeros puestos en las listas de éxitos. Sobre el último, Il Vouto, versará mayoritariamente su concierto del sábado, aunque también repasará su repertorio más conocido.
Sublime también es la manera de acariciar las teclas del gaditano Chano Domínguez. Iniciado en el rock, pero cuajado luego en el jazz, Domínguez pasa por ser uno de los grandes del piano en España y que mejor ha armonizado las improvisaciones del jazz con el deje flamenco del sur español. Su extensa discografía, tanto acompañando a otros artistas, en sus propios proyectos o a piano solo, se va a ver aumentada con lo que se sonsaque de las tres noches que esta semana pasa en el acogedor Clamores. Los conciertos se van a grabar para la posterior edición de un disco en directo.
- Sin sustancia. Ante tamaña muestra de talento, resulta casi banal la música que ofrecen Hombres G, a pesar de que su repercusión popular esté lejos de la intrascendencia. Los G marcaron todo un estilo en los ochenta y han vuelto en los últimos años casi con la misma fuerza. Con sus fans originales ya entraditas en la cuarentena, están captando seguidoras más jóvenes. 10 se llama su reciente disco, y servirá de base para su concierto de La Riviera.
- El regreso. Hace 14 años editaron su último disco, y en 1996 se separaron con un gran concierto en Sidney. Diez años después, los australianos Crowed House han decidido volver. Sus fundadores, el cantante, compositor y guitarrista Neil Finn, y el bajista Nick Seymur han vuelto a contar con Mark Hart (teclados y guitarra) para refundar la banda, con la incorporación de un nuevo baterista, Matt Sherrod, en sustitución del fallecido Paul Hester. En este tiempo de ausencias, su popularidad parece no haber decrecido: el concierto que van a ofrecer en La Riviera el domingo, estaba previsto celebrar en la Sala Heineken, de menor aforo. La demanda de entradas aconsejó el cambio de local. El éxito de la reciente edición de su nuevo disco, Time on earth, tiene la culpa de este triunfal regreso.
- Fiestas y conciencia. La música en directo vuelve a mostrar su cara más reivindicativa con el festival que organiza la organización PROA, a favor de los animales y contra su maltrato; o el concierto para la concienciación sobre la contracepción. Hamlet son los encargados de elevar su grito por un trato digno y de respeto al reino animal, y Edurne la encargada de decir a los más jóvenes que el sexo se ha de practicar de forma segura y en libertad.
También propicia la fiesta el portal Central Musical, que promueve a través de la Red la difusión de la música en directo. Con un variado cartel (La Unión, Tontxu, Conchita, Esmeralda Grao, Rash, 5 Tristes Tigres, Mallory Knox...), hoy mismo organizan un concierto al que se accede en su web.
Fiesta también el jueves en Ladinamo, que celebra su cuarto aniversario con la actuación de El Hijo; o el sábado en la Heineken, donde Micah P. Hinson y Manta Ray celebran el primer año de la discográfica El Lorito.
Además, a partir de ahora y gracias a la organización Live In The Living, es posible disfrutar de un concierto en una casa particular. Clovis, Aroah y Band A Part son los encargados de ofrecer el primero de un nuevo concepto que pretende ponerse de moda.