Cuatro atracadores retienen y roban a una familia inglesa en su casa de la Costa Brava
Amordazaron a los padres y encerraron en otra habitación de su casa a los tres hijos
Vuelven los robos con violencia a Cataluña. Ayer se supo que el viernes pasado una familia inglesa fue asaltada por cuatro encapuchados en su masía de Far d'Empordà (Girona). Los ladrones encerraron a los tres hijos de la pareja, de 8, 9 y 12 años, en una habitación y ataron y amordazaron al padre y a la madre y se llevaron dinero en efectivo, joyas, etcétera.
El hombre tuvo que ser atendido por heridas leves tras ser golpeado por los asaltantes, que lo obligaron a decir dónde guardaba el dinero. Una vez que los ladrones abandonaron la casa, la pareja consiguió desatarse y avisar a los ...
Vuelven los robos con violencia a Cataluña. Ayer se supo que el viernes pasado una familia inglesa fue asaltada por cuatro encapuchados en su masía de Far d'Empordà (Girona). Los ladrones encerraron a los tres hijos de la pareja, de 8, 9 y 12 años, en una habitación y ataron y amordazaron al padre y a la madre y se llevaron dinero en efectivo, joyas, etcétera.
El hombre tuvo que ser atendido por heridas leves tras ser golpeado por los asaltantes, que lo obligaron a decir dónde guardaba el dinero. Una vez que los ladrones abandonaron la casa, la pareja consiguió desatarse y avisar a los Mossos d'Esquadra, aunque no precisaron el tiempo que habían estado retenidos contra su voluntad. Según los agentes, los niños no sufrieron daños y el hombre se recuperó rápidamente de las heridas producidas por los golpes.
Durante la madrugada de ayer otros cuatro asaltantes, tres de ellos encapuchados y uno más a cara descubierta, entraron en el chalet de Günther Wehling y su esposa Liselotte en Cambrils (Tarragona). Les robaron 3.900 euros en efectivo y varias joyas. El matrimonio, septuagenario, lleva más de 30 años acudiendo cada año a su chalet de la urbanización Mar Cambrils y apenas hacía 15 días que habían iniciado sus vacaciones.
Un amigo de la pareja explicó ayer que los asaltantes amenazaron de muerte al matrimonio con un cuchillo y un destornillador y que incluso llegaron a golpear varias veces a la mujer para que su marido les entregara el dinero. Pese a estas amenazas, ninguno de los dos jubilados precisó de atención médica.
Los ladrones encerraron al matrimonio en una habitación, donde permanecieron retenidos durante una hora, mientras buscaban el dinero y las joyas. Hacia las 4.30 huyeron con el coche de las víctimas.