Tres muertos al estrellarse una avioneta en Jerez
Dos de los fallecidos y otro ocupante que resultó herido grave tenían licencia de piloto
Tres personas murieron y una sufrió múltiples fracturas al estrellarse ayer un avión bimotor, marca Piper y modelo Séneca, a poco menos de un kilómetro del aeropuerto de Jerez de la Frontera (Cádiz). El herido quedó ingresado en el hospital local con politraumatismo severo. Dos de los fallecidos y el ocupante que salvó la vida, tenían licencia de piloto y uno de ellos había dado la vuelta al mundo.
El siniestro ocurrió a las 13.10 por causas que aún se desconocen. El avión procedía del aeródromo de Fuentemilanos (Segovia). Los cuatro pasajeros pretendían recoger otro aeroplano que había...
Tres personas murieron y una sufrió múltiples fracturas al estrellarse ayer un avión bimotor, marca Piper y modelo Séneca, a poco menos de un kilómetro del aeropuerto de Jerez de la Frontera (Cádiz). El herido quedó ingresado en el hospital local con politraumatismo severo. Dos de los fallecidos y el ocupante que salvó la vida, tenían licencia de piloto y uno de ellos había dado la vuelta al mundo.
El siniestro ocurrió a las 13.10 por causas que aún se desconocen. El avión procedía del aeródromo de Fuentemilanos (Segovia). Los cuatro pasajeros pretendían recoger otro aeroplano que había sido reparado en las instalaciones andaluzas. Cuando realizaba las maniobras de aproximación a la pista, a unos 900 metros de distancia y 1.000 de altura, cayó sobre una zona de cultivo en la pedanía de Guadalcacín en picado, según las primeras investigaciones.
El propietario del mesón Santa Teresa, cercano al lugar del accidente, y el cocinero de este establecimiento hostelero, Giolandi García, acudieron al lugar del siniestro. "Vimos a un hombre que aún estaba vivo y lo sacamos. Nos lo pensamos porque el avión echaba gasolina, pero nos dimos cuenta de que aún se movía, así que cortamos el cinturón de seguridad", relató García.
La avioneta fue matriculada en España en septiembre de 2000 y al menos tres de sus cuatro pasajeros tenían título para pilotar. La noticia del accidente causó conmoción en Segovia, donde los fallecidos eran muy conocidos. López Parras, promotor inmobiliario de 69 años, volaba desde los 20 y en 2001 apoyó desde otra avioneta al piloto Michel Gordillo cuando realizó la vuelta al mundo a bordo de un monomotor experimental. El herido de gravedad, Miguel Ángel García Barrio, de 49 años, también tenía licencia para pilotar avionetas. Dirigía una agencia inmobiliaria.
El más joven, Carlos Gutiérrez Borondo, de 30 años, que había contraído matrimonio hace escasamente un año, era el piloto oficial del vuelo y Jesús Martín Fáez, de 54 años y empleado de banca, era copropietario de un restaurante en El Puerto de Santa María (Cádiz).