La Junta aboga por el retorno a sus países de los menores inmigrantes

La Junta de Andalucía apuesta por el regreso a sus países de origen de los menores inmigrantes que no lleguen acompañados de familiares a las costas de la comunidad ante la saturación de los centros de protección. En agosto vivían 844 menores en estos centros frente a las 610 plazas disponibles.

Estos datos fueron ofrecidos ayer en el Parlamento andaluz por la consejera para la Igualdad, Micaela Navarro, quien advirtió de que la Junta "no puede atender de manera indefinida" a los menores inmigrantes que se encuentran en los centros de protección. Por este motivo abogó por la reagrupació...

La Junta de Andalucía apuesta por el regreso a sus países de origen de los menores inmigrantes que no lleguen acompañados de familiares a las costas de la comunidad ante la saturación de los centros de protección. En agosto vivían 844 menores en estos centros frente a las 610 plazas disponibles.

Estos datos fueron ofrecidos ayer en el Parlamento andaluz por la consejera para la Igualdad, Micaela Navarro, quien advirtió de que la Junta "no puede atender de manera indefinida" a los menores inmigrantes que se encuentran en los centros de protección. Por este motivo abogó por la reagrupación familiar con "todas" las garantías legales. Se trata de menores que vienen a buscar trabajo, cuentan con apoyo familiar y no están desamparados, según la consejera, que destacó que la edad media está sufriendo un significativo descenso (muchos tienen unos 12 años) y que se limitan a estar de forma "indefinida" en los centros.

Los 30 centros de acogida inmediata que tiene la Junta para atender a estos menores inmigrantes se encuentran al 109% de ocupación, al sobrepasar las 560 vacantes, y han tenido que ampliar su capacidad hasta llegar a las 610 plazas actuales.

Navarro subrayó, no obstante, que a esta situación se suma el hecho de que en el mes de agosto se alcanzó la cifra de 844 menores inmigrantes residiendo en los centros, si bien fueron atendidos un total de 1.502, de los que el 97% son marroquíes. "Seguir incrementando los recursos residenciales no es la solución", aseveró.

La Junta andaluza, dijo Navarro, viene trabajando con el Gobierno central y el marroquí en la búsqueda de soluciones a este asunto. La solución, según la consejera, pasa por el regreso de los menores con sus familias a sus países de origen.

Además, dijo, deben aplicarse políticas de cooperación que ofrezcan promoción social y laboral a los inmigrantes para que "no tengan que arriesgar la vida en travesías en busca de posibilidades".

Navarro recordó que el plan de emergencia de la Junta se puso en macha por primera vez en junio de 2005 y que desde entonces se ha activado en 18 ocasiones por la llegada masiva de menores inmigrantes.