Dos sindicalistas se cuelgan del viaducto en protesta por los despidos en Seat

Dos militantes de la Confederación General del Trabajo (CGT) se colgaron ayer con cuerdas y arneses del viaducto sobre la calle de Segovia y estuvieron suspendidos en el aire alrededor de una hora. Los dos sindicalistas protestaban contra los despidos y la deslocalización de empresas del sector de la automoción. Llevaban una pancarta contra la "represión" y los despidos en Volkswagen-Seat y anunciaban la manifestación que el sindicato ha convocado para el próximo sábado, 10 de junio.

"El sábado será como un 1 de mayo, pero sólo de la CGT", explicaban ayer fuentes del sindicato. Para pre...

Dos militantes de la Confederación General del Trabajo (CGT) se colgaron ayer con cuerdas y arneses del viaducto sobre la calle de Segovia y estuvieron suspendidos en el aire alrededor de una hora. Los dos sindicalistas protestaban contra los despidos y la deslocalización de empresas del sector de la automoción. Llevaban una pancarta contra la "represión" y los despidos en Volkswagen-Seat y anunciaban la manifestación que el sindicato ha convocado para el próximo sábado, 10 de junio.

"El sábado será como un 1 de mayo, pero sólo de la CGT", explicaban ayer fuentes del sindicato. Para preparar esa manifestación, a la que los organizadores esperan que acudan unas 20.000 personas de toda España, durante esta semana CGT realiza una serie de protestas diarias por los derechos laborales.

Ayer, a las 11 de la mañana y durante más de una hora, dos militantes del sindicato estuvieron colgados con cuerdas y arneses del viaducto de la calle de Segovia. Una hora antes, otro grupo de militantes del mismo sindicato se había concentrado frente al concesionario de Volkswagen en el número 36 de la calle de Toledo para protestar por los despidos que la multinacional está llevando a cabo en los últimos meses. A la protesta acudieron el secretario general de CGT, Eladio Villanueva, y el secretario de Acción Sindical, Ángel Luis García, entre otros.

Los dos hombres que se colgaron son Antonio Montañés, de 46 años y empleado de la Universidad de Zaragoza, y Antonio Martínez, de 43 y ferroviario de talleres de Renfe. Ninguno de los dos tiene relación con el sector de la automoción contra el que se dirigía la protesta de ayer, pero acudieron "en solidaridad con los compañeros de CGT". Ambos son aficionados a la escalada y aseguraron que la espectacular protesta no entrañaba ningún riesgo. "Como no salimos en la prensa, tenemos que hacer estas cosas", decía Martínez.

Mañana, el sindicato tiene previsto manifestarse frente al Ministerio de Agricultura para protestar contra el cierre de la azucarera de Linares y "en defensa del sector público". El viernes está prevista una concentración frente a la embajada de México para protestar "contra la vulneración de los derechos humanos que se ha llevado a cabo en ese país repetidamente", explicaban fuentes de CGT.