Carod pide el 'no' para singularizar a Cataluña del resto de España

CiU se rodea de PNV y BNG para demostrar que el nacionalismo vota 'sí' al Estatuto

El presidente de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Josep Lluís Carod Rovira, pidió ayer a los electores "un no claro", que obligue a aceptar el proyecto tal como fue aprobado por el Parlamento catalán e "inicie la singularización de Cataluña" en España. El mitin, que se celebró en el antiguo palacio de deportes de Barcelona, ahora convertido en Teatro Musical, mezcló discursos políticos y espectáculos. Asistieron 1.100 personas.

ERC no ha sido expulsada del Gobierno catalán sólo por haber tenido la "dignidad" de defender en Madrid en junio de 2006 el mismo proyecto ...

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El presidente de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Josep Lluís Carod Rovira, pidió ayer a los electores "un no claro", que obligue a aceptar el proyecto tal como fue aprobado por el Parlamento catalán e "inicie la singularización de Cataluña" en España. El mitin, que se celebró en el antiguo palacio de deportes de Barcelona, ahora convertido en Teatro Musical, mezcló discursos políticos y espectáculos. Asistieron 1.100 personas.

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ERC no ha sido expulsada del Gobierno catalán sólo por haber tenido la "dignidad" de defender en Madrid en junio de 2006 el mismo proyecto de Estatuto que el 30 de septiembre de 2005 en el Parlamento catalán, dijo Carod. Ha sido expulsada "porque molesta a ciertos intereses económicos". No los especificó, pero aludió a ellos indicando que "son los que ahora se frotan las manos pensando en la sociovergencia". Aseguró que, contra los augurios de los que piensan en otras combinaciones, ERC "volverá al Gobierno de la Generalitat porque el pueblo le hará entrar por la puerta grande".

El secretario general del partido, Joan Puigcercós, acusó a los partidos catalanes que promueven el en el referéndum de no tener ya "otro argumento que el del PP". En realidad, el PP "ya ha ganado su batalla contra el Estatuto" porque "el recorte ya está hecho". Afirmó asimismo que en el largo proceso del Estatuto ha habido un reparto de papeles entre el PP y el PSOE. El PP ha hecho de policía malo, el que te sacude; el PSOE ha hecho de policía bueno, el que te ofrece café. "Pero al final los dos te amuelan igual porque van a medias".

El PSC y CiU recurrieron a sus aliados más tradicionales para dar fuelle a su defensa del Estatuto. Mientras el presidente del PSC y de la Generalitat, Pasqual Maragall, se rodeaba de 140 alcaldes socialistas con el objetivo de publicitar los avances del Estatuto para el mundo local, Convergència recurría al PNV y al BNG -aliados en la plataforma Galeusca- para defender que todo buen nacionalista debe votar en el referéndum.

Mas dijo no entender el no de los republicanos cuando reveló que en Madrid estaban dispuestos a aceptar la sustitución del término nación en el texto por el de comunidad o realidad nacional.

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Maragall tuvo que escuchar peticiones de los alcaldes que sonaron a reproche. Ante el escenario de elecciones autonómicas anticipadas, los ediles de su partido le pidieron que gobierne "más allá del referéndum".

El presidente de la Generalitat aseguró por la tarde, en La Pobla de Segur (Lleida), que después del 18-J Cataluña será reconocida como una nación. También por la tarde, en un mitin celebrado en el campus universitario de Bellaterra (Barcelona), el primer secretario del PSC, el ministro José Montilla, pidió a José Blanco, secretario de organización del PSOE, que difunda la labor de cohesión del socialismo catalán.

El presidente del PP catalán, Josep Piqué, reunió a una treintena de militantes de Jóvenes Generaciones en el parador de Sau, cerca de Vic, donde se redactó el Estatuto de 1979. El acto empezó con una hora de retraso porque la expedición se perdió, lo que fue motivo de bromas, aunque no minó el entusiasmo de los jóvenes que reivindicaron el espíritu del Estatuto de Sau.

Josep Lluís Carod, ayer durante el mitin central de Esquerra en BarcelonaCARMEN SECANELLA

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