Los vecinos mantienen las movilizaciones en contra

"Un paso en la dirección correcta, pero claramente insuficiente". Los portavoces de las asociaciones de los tres distritos en los que se retirarán las plazas reservadas a los no residentes -Carabanchel, Hortaleza y Fuencarral- coinciden en su análisis de la decisión del alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón. Y como demostración de que no se dan por satisfechos con la eliminación de las líneas azules, ayer se repitieron las protestas en Hortaleza y en la calle de Sangenjo (Fuencarral).

La opinión en las calles de Carabanchel Alto es unánime: "Ni azules ni verdes ni blancas; que Gallardón quite...

"Un paso en la dirección correcta, pero claramente insuficiente". Los portavoces de las asociaciones de los tres distritos en los que se retirarán las plazas reservadas a los no residentes -Carabanchel, Hortaleza y Fuencarral- coinciden en su análisis de la decisión del alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón. Y como demostración de que no se dan por satisfechos con la eliminación de las líneas azules, ayer se repitieron las protestas en Hortaleza y en la calle de Sangenjo (Fuencarral).

La opinión en las calles de Carabanchel Alto es unánime: "Ni azules ni verdes ni blancas; que Gallardón quite los parquímetros y deje el barrio como estaba antes", sentencia la dependienta de una panadería. Aunque algún vecino considera la decisión municipal "un avance", la mayor parte de los residentes consultados manifiesta su intención de continuar con las protestas en contra de la extensión del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER) a la periferia. "Con más ganas ahora todavía, porque vemos que el Ayuntamiento reacciona ante las movilizaciones", agrega el portavoz vecinal Juan Fernández.

Mientras su hija juega en la plaza de la Emperatriz, Pilar asegura que con la nueva medida sólo tendrán que pagar los residentes en Carabanchel, que tendrán los mismos problemas de aparcamiento por las noches. "Que lo entienda quien pueda. No tiene ningún sentido", concluye. A su lado, un grupo de vigilantes del SER cuenta que el día anterior sufrieron una agresión a manos de vecinos. "Ni siquiera íbamos a multar, sólo estábamos notificando que tenían que mover el coche en dos horas y llegaron 10 ó 15 personas que nos tiraron huevos duros, de los que duelen", dice una de ellas.

Juan Fernández interpreta el anuncio del Consistorio como un intento por desactivar la manifestación conjunta que mañana recorrerá el centro de Madrid, convocada por organizaciones críticas con la política de movilidad del Ayuntamiento y que cuenta con el apoyo de las asociaciones de autónomos y pequeños comerciantes de Copyme.