IRPF: más fácil y más rápido por Internet

Llegó la hora. Hay que hacer la declaración de la renta, aunque hay tiempo hasta el 30 de junio. Es obligatoria, a menos que se ganen menos de 22.000 euros al año. Si le asusta el papeleo, rellenar todos los datos y no quiere acercarse a la oficina más próxima de la Agencia Tributaria puede recurrir a Internet para solucionarlo, pero...

Antes que nada hay que estar en posesión de un certificado digital. Si aún no lo tiene, solicítelo a alguna de las entidades certificadoras autorizadas, como la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre (FNMT), la Generalitat Valenciana, colegios profesionales...

Llegó la hora. Hay que hacer la declaración de la renta, aunque hay tiempo hasta el 30 de junio. Es obligatoria, a menos que se ganen menos de 22.000 euros al año. Si le asusta el papeleo, rellenar todos los datos y no quiere acercarse a la oficina más próxima de la Agencia Tributaria puede recurrir a Internet para solucionarlo, pero...

Antes que nada hay que estar en posesión de un certificado digital. Si aún no lo tiene, solicítelo a alguna de las entidades certificadoras autorizadas, como la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre (FNMT), la Generalitat Valenciana, colegios profesionales como el de Notarios o Abogados o el Banco Español de Crédito, por ejemplo. (Puede consultar la lista completa en: http://aeat.es/prestelem/certauto.htm).

Si no lo tiene, el camino más sencillo es la FNMT, a través de su página (www.cert.fnmt.es). Primero descargue e instale el certificado raíz de FNMT, ya que es necesario para comprobar la autenticidad de cualquier certificado emitido por ella. Después solicite su certificado indicando simplemente su NIF. Se le suministrará un código que tendrá que presentar junto con su DNI para identificarse en la oficina de Hacienda más próxima. Será la única visita que tendrá que hacer ya que, una vez que tenga su certificado personal instalado, podrá hacerlo todo y para siempre desde casa a través de Internet.

La Agencia Tributaria está tratando de que cada año sea más fácil la declaración del impuesto sobre la renta (IRPF); desde hace dos años envía borradores de la misma a todos los contribuyentes que lo piden. (Hasta el 28 de marzo se habían solicitado 8.683.900 borradores o datos fiscales, un 31% más que en 2005). Si el contribuyente está de acuerdo con el borrador (y no aprecia ningún error, ni a favor, ni en contra), para que la declaración sea firme basta confirmarlo por Internet, por teléfono, por banca electrónica o con un simple SMS. Sin embargo, Internet y el certificado digital dan para mucho más. Una de las cosas que ya puede consultar son sus datos fiscales directamente de la base de datos de la propia Agencia. Puede descargarse el programa PADRE y rellenarlo tranquilamente. O, mejor aún, puede incorporar automáticamente los datos fiscales con el mismo programa. Es posible que algunos de estos datos los tenga que rellenar manualmente, ya que no tienen una regla general de aplicación.

Para completar la declaración por Internet (el año pasado el 19% de todas se tramitaron por esta vía) hay que tener a mano los datos fiscales y que concuerden con los de Hacienda, así como la referencia catastral de su vivienda, sobre todo si es de alquiler, ya que Hacienda está prestando especial atención a los propietarios que no declaran el alquiler de su vivienda.

Con el programa PADRE la declaración se hace y se envía por Internet en pocos minutos. Las declaraciones que la Agencia Tributaria recibe por este método se tramitan más rápidamente que las manuales, ya que el cruce de datos es más sencillo, lo que hace que si le sale negativa y solicita devolución, ésta le llegará antes.