El Tribunal Superior desestima la petición de un grupo ecologista de paralizar parte de las obras de la M-501
El Tribunal Superior de Justicia ha desestimado la paralización de las obras de la carretera de circunvalación de Pelayos de la Presa, petición hecha el pasado 11 de noviembre por el grupo ecologista Sierra Oeste Desarrollo SOStenible. La variante de Pelayos de la Presa, situada entre los kilómetros 50 y 54 de la M-501, forma parte de la conversión en autovía de la también conocida como carretera de los pantanos.
La asociación ecologista denunciaba entonces que las obras que realiza el Gobierno regional "están afectando a especies protegidas e incumplen la declaración de impacto ...
El Tribunal Superior de Justicia ha desestimado la paralización de las obras de la carretera de circunvalación de Pelayos de la Presa, petición hecha el pasado 11 de noviembre por el grupo ecologista Sierra Oeste Desarrollo SOStenible. La variante de Pelayos de la Presa, situada entre los kilómetros 50 y 54 de la M-501, forma parte de la conversión en autovía de la también conocida como carretera de los pantanos.
La asociación ecologista denunciaba entonces que las obras que realiza el Gobierno regional "están afectando a especies protegidas e incumplen la declaración de impacto ambiental", por lo que solicitaba a la Sala de lo Contencioso-Administrativo del tribunal la suspensión inmediata de la construcción de la citada variante de la carretera.
El tribunal responde que "en ningún momento" se acredita "la existencia del peligro" de que la ejecución de las obras "pueda conllevar perjuicios [...] de difícil o imposible reparación". El conflicto entre dos intereses contrapuestos -por una parte, evitar el perjuicio que la suspensión de las obras ocasionaría a los intereses públicos, y por otro, impedir que la construcción de la carretera cause daños irreparables- lo soluciona el tribunal apoyándose en una sentencia dictada en 2001 por el Supremo: "Este conflicto debe ser resuelto con la decisión que [...] revele ser la de menos efectos perjudiciales". Por eso, la resolución, que no es firme y contra la que cabe recurso, opta por preservar los intereses de la Administración y quita la razón a los ecologistas.
La denominada variante de Pelayos de la Presa tiene un coste de 10 millones de euros y supone más de seis kilómetros de nuevo trazado, con dos glorietas que enlazarán con el recorrido actual de la M-501.
La tala de 500 árboles en Pelayos de la Presa el pasado febrero originó protestas entre los ecologistas. Un mes más tarde, 168 científicos denunciaron ante la Comisaría de Medio Ambiente de la UE los daños medioambientales que causará el controvertido proyecto de autovía. "Se va a actuar contra uno de los más valiosos ecosistemas de toda España", señaló Emilio Virgós, profesor de Ecología de la Universidad Rey Juan Carlos.