Maragall alerta del "fraude" de supeditar el tripartito a los acuerdos con CiU

El presidente del PSC y jefe del Ejecutivo catalán, Pasqual Maragall, quiso transmitir ayer de viva voz al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, la inquietud que ha causado en las filas de los socialistas catalanes el progresivo acercamiento de Convergència i Unió al PSOE en el Congreso de los Diputados, sobre todo tras el acuerdo estatutario alcanzado con Artur Mas el pasado 21 de enero.

Sin cuestionar en ningún momento la política de alianzas del PSOE, Maragall sí advirtió de que lo que este partido haga en Madrid no debe afectar a la política catalana y, más concreta...

El presidente del PSC y jefe del Ejecutivo catalán, Pasqual Maragall, quiso transmitir ayer de viva voz al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, la inquietud que ha causado en las filas de los socialistas catalanes el progresivo acercamiento de Convergència i Unió al PSOE en el Congreso de los Diputados, sobre todo tras el acuerdo estatutario alcanzado con Artur Mas el pasado 21 de enero.

Sin cuestionar en ningún momento la política de alianzas del PSOE, Maragall sí advirtió de que lo que este partido haga en Madrid no debe afectar a la política catalana y, más concretamente, al Gobierno tripartito que preside.

De "fraude histórico" calificó Maragall la posibilidad de que la colaboración entre el PSOE y CiU acabe por poner en peligro la mayoría progresista del tripartito. Y llegó más lejos al recordar a Zapatero que en anteriores etapas de colaboración entre los nacionalistas catalanes y los socialistas las cosas no han acabado precisamente bien para los segundos. En este sentido, recordó la salida del Gobierno del entonces vicepresidente Narcís Serra "por exigencias de CiU" y la "retirada del apoyo antes de tiempo" de los nacionalistas al Ejecutivo de Felipe González. Pasqual Maragall, sin embargo, se mostró confiado en que no le ocurrirá lo mismo a José Luis Rodríguez Zapatero.

Es más, llegó a calificar de "positivo" que la federación nacionalista se incorpore a la mayoría parlamentaria encabezada por el PSOE y abandone su política de "ir a Madrid a comprar pescado a bajo precio". Eso sí, el presidente catalán solicitó ante Zapatero que sea "valorada" la actitud de colaboración mantenida por los republicanos en los últimos dos años en el Congreso de los Diputados.

Sobre la situación política en Cataluña, Maragall aseguró que el programa del tripartito tiene una validez de al menos "seis años más" y consideró "muy poco probable" que los nacionalistas de Convergència i Unió puedan recuperar el poder durante este periodo.