El renacimiento madrileño, en ruinas

El este de Madrid demanda dos actuaciones urgentes para salvar de la ruina dos emblemas de su patrimonio arquitectónico: el palacio renacentista de Mondéjar, en el municipio de Corpa, y un paño de la muralla medieval de Alcalá de Henares, derrumbado fortuitamente hace siete semanas.

Corpa es uno de los municipios madrileños más cercanos a la Alcarria. Enclavado apenas a ocho kilómetros del límite de Madrid con la provincia de Guadalajara y a 13 de Alcalá de Henares, cuenta con unos 500 vecinos; su casco se encarama en un promontorio algo escarpado que resalta en medio de anchurosas dehe...

El este de Madrid demanda dos actuaciones urgentes para salvar de la ruina dos emblemas de su patrimonio arquitectónico: el palacio renacentista de Mondéjar, en el municipio de Corpa, y un paño de la muralla medieval de Alcalá de Henares, derrumbado fortuitamente hace siete semanas.

Corpa es uno de los municipios madrileños más cercanos a la Alcarria. Enclavado apenas a ocho kilómetros del límite de Madrid con la provincia de Guadalajara y a 13 de Alcalá de Henares, cuenta con unos 500 vecinos; su casco se encarama en un promontorio algo escarpado que resalta en medio de anchurosas dehesas de olivos de umbría copa.

Un edificio del último tercio del siglo XVI y principios de la centuria siguiente, flanqueado por dos columnas toscanas, con sótano y dos plantas con 14 grandes ventanales enrejados al modo del barroco, rematadas por sendos torreones, señala el casal más conocido del pueblo: se trata de un palacio que perteneciera a los marqueses de Mondéjar, cuyos antepasados, como los de la poderosa familia Mendoza, anfitriona del renacimiento en España precisamente en estas tierras, ejercieron su señorío sobre ellas desde la Edad Media hasta apenas unas décadas. El palacio se encuentra al borde de la ruina. Ahora, se trata de salvarlo con urgencia.

Un derrumbamiento abatió parte del torreón que jalona la puerta de Burgos

Ésta es la tarea que se ha propuesto Antonio Chazarra, parlamentario socialista responsable de asuntos patrimoniales y culturales en la Asamblea de Madrid. "Creo que estamos ante una verdadera joya arquitectónica, única en la Comunidad de Madrid", asegura el parlamentario. "O actuamos velozmente o Madrid perderá este vestigio superviviente de su pasado renacentista", explica.

Uno de los problemas que ha impedido atajar su ruina ha consistido en que la propiedad del palacio se hallaba muy dividida, concretamente entre 23 propietarios de media docena de familias, hecho que dificultaba sobremanera la consecución de acuerdos de actuación conjunta. Hasta hace un lustro, habitó un ala del palacio una anciana de nombre Nieves, que ha muerto hace dos meses, cuenta un vecino. Otra ala del palacio era propiedad del vecino Mariano Sánchez, y otras más, de varios moradores de Los Santos de la Humosa. Tras cierto tiempo para el acuerdo, desde hace cuatro años el palacio pertenece a una sociedad de Alcalá de Henares, que quiere instalar allí, de momento, la sede de una ganadería cuya vacada es de 150 reses. "Vamos despacito", dice Julio García Lerma, uno de sus propietarios.

"La solución ideal tendría tres ejes", explica Chazarra. "El primero consistiría en que el palacio de Mondéjar de Corpa pasara a propiedad pública, por adquisición por parte de la Comunidad de Madrid u otra institución". "El segundo eje implicaría su restauración cabal y, el tercero, la asignación de un destino que pudiera estimular la identidad del municipio y su rentabilidad cultural, como polo turístico, por ejemplo". Por el momento, los nuevos propietarios no parecen querer vender, aunque la hipótesis de albergar un parador, un hotel rural o, incluso, un museo, en un ámbito regional muy necesitado de dotaciones culturales, no cabe descartarla, según García Lerma. "Pero a medio plazo y en colaboración con la Comunidad".

"El Ayuntamiento de Corpa tiene hoy otras prioridades, necesitado como está de infraestructuras e instalaciones que retengan a la población joven", afirma su alcalde, Guillermo Cózar. "A 13 kilómetros de Alcalá", dice, "apenas tenemos servicio médico. Voy a tener que proclamar un bando para prohibir a los vecinos ponerse enfermos los fines de semana", ironiza. "Para urgencias, tenemos que ir a Torres de la Alameda, a 11 kilómetros".

El diputado regional Antonio Chazarra se muestra, sin embargo, optimista, habida cuenta de que existe, en los últimos meses, cierta sintonía entre la oposición socialista en la Asamblea de Madrid y el equipo de Gobierno del Partido Popular, cuyas responsabilidades culturales despliega el consejero Santiago Fisas. Éste, según Chazarra, se muestra receptivo a estudiar y aplicar algunas de las iniciativas que en forma de preguntas o propuestas el Grupo Socialista le ofrece.

No lejos de Corpa, dentro de Alcalá de Henares, Fisas debe actuar también con celeridad ante el reciente derrumbamiento de un paño de la medieval puerta de Burgos, una de las cuatro principales que jalonan la muralla medieval alcalaína.

El desplome, hacia el interior del perímetro de la llamada Huerta del Obispo, acaeció las pasadas navidades. El torreón al que estaba adosado el paño abatido data del siglo XIV, con modificaciones en siglos posteriores. Alcalá de Henares fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1998, lo que acentúa la gravedad del episodio.

A juicio de Santiago Fisas, el mantenimiento de ese tramo dañado de la muralla "corresponde al obispado complutense", que tiene en esa zona un acceso para un centro diocesano de la organización Cáritas. "Si el obispado tiene problemas, la Consejería puede ayudar en la restauración del paño, pero la responsabilidad de ese tramo es suya", precisa.