Montilla afirma que el PP roza el absurdo en su campaña de acoso

El portavoz socialista pide perdón por los insultos a un senador del PP

El PP arremetió de nuevo ayer en el Senado contra el ministro de Industria, José Montilla, dentro de la estrategia de forzar su dimisión por la condonación de los intereses de un crédito al PSC por parte de La Caixa. El ministro se defendió atacando: "Ustedes se han instalado en un juego basado en la falta de respeto a las instituciones y a la persona, en la traición a los intereses de España. Han llegado a un extremo que roza el absurdo".

La tensión fue creciendo en el pleno del Senado y poco después, cuando se discutía sobre las críticas de Montilla a comportamientos de la COPE, se ll...

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El PP arremetió de nuevo ayer en el Senado contra el ministro de Industria, José Montilla, dentro de la estrategia de forzar su dimisión por la condonación de los intereses de un crédito al PSC por parte de La Caixa. El ministro se defendió atacando: "Ustedes se han instalado en un juego basado en la falta de respeto a las instituciones y a la persona, en la traición a los intereses de España. Han llegado a un extremo que roza el absurdo".

La tensión fue creciendo en el pleno del Senado y poco después, cuando se discutía sobre las críticas de Montilla a comportamientos de la COPE, se llegó a los insultos contra el senador popular Agustín Conde. "¡Falangista!", se escuchaba entre rumores y, al final, un sonoro "¡payaso!", pronunciado, según Conde, por el socialista Juan José Rodríguez Torres, que le llevó a pedir amparo al presidente de la Cámara, Javier Rojo. Por la tarde, con los ánimos más calmados, el portavoz socialista, Joan Lerma, pidió excusas, y Conde se las aceptó.

El PP insistió en acosar a Montilla, que la noche anterior había visto cómo todos los demás grupos le respaldaban en el Congreso. "La sociedad española está diciendo: 'ya volvemos a las andadas", aseguró el senador popular José Seguí. "Debe dimitir, porque este país no se puede permitir tener en el Gobierno a alguien que aparentemente comercia condonaciones de deudas políticas por decisiones políticas de ámbito empresarial", continuó entre voces de protesta de los socialistas. "Debe dimitir porque ha quebrantado las más elementales normas de hacer política: la transparencia, la independencia y, por qué no, la vergüenza", insistió.

Montilla, interrumpido también con protestas de los populares, se defendió al contraataque. "No pienso inhibirme de ninguna de mis responsabilidades, aunque todavía no he tenido ocasión, no he tomado ninguna decisión sobre la OPA, que corresponde al vicepresidente segundo y ministro de Economía. Ahora bien, ¿estaba inhabilitado el señor Aznar cuando era presidente del Partido Popular y presidente del Gobierno? ¿Lo estaba el señor Rajoy por aceptar condonaciones de deuda a su partido por parte de la Caja de Galicia o de la Caja de Granada? ¿Dejó de participar en alguna de las reuniones del Consejo de Ministros por esto? Usted me dirá que no tenía por qué hacerlo; pues yo tampoco".

El ministro insistió en el ataque: "Han llegado al absurdo. No lo lamento por ustedes, que con esta actitud permanecerán tal y como ya están, en la oposición y solos durante mucho tiempo, sino por el daño que el PP está haciendo a las empresas españolas, a las instituciones, a la Comisión Europea y, sobre todo, al sistema democrático. Porque en política no vale todo, debe haber unos límites".

Conde le acusó de atacar la libertad de expresión, recordó las irregularidades cometidas por socialistas en los años noventa, y afirmó: "Volvemos a despertarnos conociendo los chanchullos del PSOE".

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José Montilla, durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso.BERNARDO PÉREZ

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