Barreras
Frecuentemente las personas solemos idolatrar a aquellos individuos o grupos que, de una manera u otra, han sido capaces de romper barreras. No siempre ocurre esto; veamos un ejemplo cercano. Permítanme presentarles a Avapace (Asociación Valenciana de Ayuda a la Parálisis Cerebral), entidad que, desde hace más de 30 años, trabaja rompiendo barreras a favor de este colectivo. Durante este tiempo las han tenido de todo tipo. Algunas de estas barreras resultaron fáciles de superar: las arquitectónicas; otras se convirtieron en grandes muros: las políticas.
En estos momentos, por desgracia,...
Frecuentemente las personas solemos idolatrar a aquellos individuos o grupos que, de una manera u otra, han sido capaces de romper barreras. No siempre ocurre esto; veamos un ejemplo cercano. Permítanme presentarles a Avapace (Asociación Valenciana de Ayuda a la Parálisis Cerebral), entidad que, desde hace más de 30 años, trabaja rompiendo barreras a favor de este colectivo. Durante este tiempo las han tenido de todo tipo. Algunas de estas barreras resultaron fáciles de superar: las arquitectónicas; otras se convirtieron en grandes muros: las políticas.
En estos momentos, por desgracia, ha aflorado una barrera muy compleja: la social. Un colectivo vecinal de la plaza José María Orense se está movilizando para paralizar las obras de la residencia para personas adultas con parálisis cerebral que se va a ejecutar en dicha plaza. Los vecinos alegan que, los terrenos públicos donde irá ubicada la residencia, estaban destinados inicialmente a un parque.
Sin ánimo de entrar en polémicas, y respetando los motivos que mueven a estos vecinos, la realidad legal del conflicto está de parte de Avapace. Dejemos pues que sigan rompiendo barreras.