Condenado a diez años por violación un hombre para el que la fiscal pedía 286
El procesado abusó de su hija múltiples veces durante un mes y medio
La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Guipúzcoa ha condenado a un hombre a diez años de prisión, frente a los 286 que reclamaba la Fiscalía, por violar a su hija, mayor de edad, en numerosas ocasiones durante un mes y medio. El tribunal entiende que los hechos constituyen un delito continuado y único de agresión sexual, mientras que el Ministerio Público consideraba que se trataba de diferentes actos punibles.
Los hechos ocurrieron entre los primeros días de octubre de 2003 y el 24 de noviembre de ese mismo año. Durante ese tiempo, J.E.R., de 51 años, "mantuvo relaciones sexu...
La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Guipúzcoa ha condenado a un hombre a diez años de prisión, frente a los 286 que reclamaba la Fiscalía, por violar a su hija, mayor de edad, en numerosas ocasiones durante un mes y medio. El tribunal entiende que los hechos constituyen un delito continuado y único de agresión sexual, mientras que el Ministerio Público consideraba que se trataba de diferentes actos punibles.
Los hechos ocurrieron entre los primeros días de octubre de 2003 y el 24 de noviembre de ese mismo año. Durante ese tiempo, J.E.R., de 51 años, "mantuvo relaciones sexuales no consentidas con su hija", en la treintena, "en un número [de ocasiones] que no ha podido ser concretado, pero que ha sido elevado", establece la sentencia.
El tribunal considera probado que el procesado penetró vaginalmente a su hija de manera reiterada y le introdujo "un consolador y una bomba de inflar ruedas de bicicleta" en el piso que compartían en Zarautz y luego en Azpeitia. En todas las ocasiones, "atemorizaba" a la chica diciéndole que si no accedía a mantener relaciones con él le iba a "matar". En muchos casos, dada la resistencia que ofrecía la mujer, le propinó "puñetazos y patadas". La joven accedía "por el temor que le inspiraba".
El 24 de noviembre de 2003, J.E.R. y su hija dormían en una habitación en casa de unos conocidos. El acusado intentó volver a mantener relaciones con la chica. Ella se negó y el hombre "le golpeó", por lo que la mujer "buscó refugio" en la habitación de sus anfitriones, donde pasó el resto de la noche.
El tribunal responsabiliza a J.E.R. de un delito continuado de agresión sexual y le condena a diez años de cárcel y a indemnizar a su hija con 32.400 euros por las lesiones físicas y los perjuicios morales sufridos. Le prohíbe además comunicarse con la chica, quien padece estrés postraumático y depresión, o aproximarse a ella a menos de 500 metros durante cinco años desde que cumpla la pena de prisión.
Tocamientos a menores
La Ertzaintza detuvo el miércoles en Irura a un joven de 26 años acusado de varios delitos de abusos sexuales a menores y otro de usurpación de funciones públicas. El arrestado, haciéndose pasar por ertzaina, abordó el 23 de octubre a un grupo de chicos y chicas menores en Ormaiztegi.
Tras involucrarles en un robo, les obligó a dejarse cachear, momento que aprovechó para realizarles tocamientos. Seis días después intentó sin éxito la misma táctica con dos chicas en Zizurkil. Sobre el acusado pesaban dos órdenes de detención y otra de ingreso en prisión por quebrantamiento de condena.
Detenido por maltrato
Agentes de la Ertzaintza arrestaron en la mañana del pasado miércoles en Vitoria a L.B.C., de 31 años, acusado de propinar varios golpes en el rostro a su esposa, con la que había mantenido antes una discusión. La agresión se produjo en torno a las nueve de la mañana en el domicilio de la pareja, en la calle Ecuador de la capital alavesa.
La mujer recibió asistencia en un centro sanitario de Vitoria mientras su esposo era arrestado por una patrulla de seguridad ciudadana, acusado de un delito de maltrato doméstico. El detenido ya ha pasado a disposición judicial, según informó ayer la consejería de Interior.