Taxistas colapsan el centro de Sevilla en protesta por una peatonalización

Cientos de taxistas colapsaron ayer el centro de Sevilla en protesta por la decisión del Ayuntamiento de peatonalizar a partir de Navidad la calle O'Donell, una vía flanqueada por comercios y que une la plaza de la Magdalena con la calle Tetuán. Los taxistas, alrededor de 800 según fuentes del sector y 250 según la Policía Local, partieron a las 10.30 de la estación de Santa Justa con los pilotos apagados y haciendo sonar el claxon en dirección al Ayuntamiento, donde pararon en torno a 20 minutos para exigir sin éxito que les recibiera el alcalde (que no se encontraba en el Consistorio) o algú...

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Cientos de taxistas colapsaron ayer el centro de Sevilla en protesta por la decisión del Ayuntamiento de peatonalizar a partir de Navidad la calle O'Donell, una vía flanqueada por comercios y que une la plaza de la Magdalena con la calle Tetuán. Los taxistas, alrededor de 800 según fuentes del sector y 250 según la Policía Local, partieron a las 10.30 de la estación de Santa Justa con los pilotos apagados y haciendo sonar el claxon en dirección al Ayuntamiento, donde pararon en torno a 20 minutos para exigir sin éxito que les recibiera el alcalde (que no se encontraba en el Consistorio) o algún responsable municipal.

Los taxistas, que dejaron sin servicio durante la mañana a la capital, continuaron luego hacia la plaza de la Magdalena y la calle O'Donell. Allí bajaron la marcha de la circulación y aumentaron el ruido de su protesta en medio de un amplio dispositivo policial, con agentes de la Unidad de Intervención del Cuerpo Nacional de Policía apostados a las puertas de los comercios.

La marcha se dispersó al llegar al final de la calle, pero los taxistas, convocados por las asociaciones Unión Sevillana del Taxi y Solidaridad con el Taxi, anunciaron que repetirán su protesta todos los jueves hasta que el Ayuntamiento dé marcha atrás en su idea de peatonalizar O'Donell, una iniciativa que apoyan los vecinos y los comerciantes de la calle.

El alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín, anunció ayer que no aceptará medidas de presión, pero se mostró dispuesto a buscar un recorrido alternativo para unir la plaza Nueva y la plaza del Duque, dos de los puntos neurálgicos del centro a los que ahora se accede a través de O'Donell. El nuevo recorrido, según Monteseirín, será de uso exclusivo para el transporte público y "sobre todo" para el taxi.

Los representantes de los taxistas aseguran que cualquier alternativa será "más cara" para los usuarios y para el sector.

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