Camps reúne hoy a un Consell enfrentado por el 'caso Ortuño'

El presidente de la Generalitat, Francisco Camps, y la dirección regional del PP se refugiaron ayer en el mutismo y eludieron pronunciarse sobre la reabierta crisis del PP. El sector zaplanista, por su parte, arreció con las críticas hacia el dimitido subdelegado del Consell en Elche, Manuel Ortuño, y solicita ahora su expulsión del partido. El Gobierno valenciano se reúne hoy dividido en una sesión en la que se dará cuenta de la decisión de Ortuño después de que dos consejeras y siete diputadas populares firmasen una propuesta para reprobarlo presentada por el PSPV.

El episodio registr...

El presidente de la Generalitat, Francisco Camps, y la dirección regional del PP se refugiaron ayer en el mutismo y eludieron pronunciarse sobre la reabierta crisis del PP. El sector zaplanista, por su parte, arreció con las críticas hacia el dimitido subdelegado del Consell en Elche, Manuel Ortuño, y solicita ahora su expulsión del partido. El Gobierno valenciano se reúne hoy dividido en una sesión en la que se dará cuenta de la decisión de Ortuño después de que dos consejeras y siete diputadas populares firmasen una propuesta para reprobarlo presentada por el PSPV.

El episodio registrado el miércoles en el pleno de las Cortes Valencianas ha vuelto a desbordar al jefe del Consell. Camps eludió ayer a los periodistas para evitar tener que hacer declaraciones y pidió silencio a los suyos. Tan solo la secretaria regional del PP, sorprendida por los periodistas, acertó a balbucear respecto a la crisis: "Nada que decir. No es cuestión mía. El partido respeta [la decisión de Ortuño], respeto total".

Presumiblemente, el vicepresidente del Consell, Víctor Campos, dará en la reunión de hoy cuenta a los miembros del gabinete de la dimisión del subdelegado. Una renuncia en la que difícilmente se le agradecerán los servicios prestados, ya que entre los consejeros figura Miguel Peralta uno de los acusados por Ortuño de falsificar los censos de la militancia del PP de Elche.

La consejera de Bienestar Social, Alicia de Miguel, una de las firmantes de la reprobación de Ortuño, condenado a pagar una multa por insultar a una diputada nacional del PP, insistió ayer en que siempre ha "condenado a toda persona, sea hombre o mujer, que insulte, agreda o haga comentarios de mal gusto", y lo seguirá haciendo. "Tenemos que ser inflexibles y condenar esos comentarios vengan de donde vengan". En términos parecidos se expresó la consejera de Participación, Gema Amor, que también suscribió el escrito de reprobación. Amor aseguró ayer que su decisión no responde a ninguna maniobra contra el presidente de la Generalitat, sino que quiso expresar su repulsa por la actitud vejatoria de Ortuño.

La crisis motivada por la adhesión de las parlamentarias populares provocó ayer que arreciasen las críticas en privado de cargos populares, tanto campistas como zaplanistas, contra el portavoz Serafín Castellano. Las fuentes consultadas resaltaron la incapacidad de Castellano, que ayer también guardó silencio, para controlar la situación y evitar que nueve integrantes del grupo parlamentario se sumasen a la reprobación socialista. "No supo dar una alternativa a la portavoz de la comisión de la mujer, Elvira Suances y se le fue el asunto de las manos".

Castellano se tendrá que pronunciar sobre el escrito de reprobación, que ha sido registrado oficialmente por el PSPV, en la próxima Junta de Portavoces que tendrá que decidir si lo incluye o no en el orden del día del pleno parlamentario del próximo día 27. Fuentes del PP indicaron que, al no haber unanimidad, la declaración institucional de reprobación a Ortuño no se tramitará.

Ayer, el secretario general del PP, Ángel Acebes, interpelado por lo sucedido, manifestó que la dimisión del subdelegado del Consell en Elche "es una decisión libre y no tiene ninguna relación con ningún expediente sancionador". Acebes argumentó que el Comité de Derechos y Garantías del PP "tiene abiertos expedientes por determinados acontecimientos [la pelea entre militantes en el PP de Elche durante la elección de compromisarios el pasado mes de octubre, en el transcurso de la cual Ortuño insultó a la diputada del PP] y estos siguen su curso".

Estas manifestaciones del secretario nacional del PP no impidieron que los principales cargos del partido en Alicante exigiesen la expulsión de Manuel Ortuño.

El presidente del PP provincial y de la Diputación de Alicante, José Joaquín Ripoll, aseguró que continuará "trabajando para que Ortuño no siga en el PP". El presidente de las Cortes y del PP local de Alicante, Julio de España tachó de "imprescindible" la expulsión de Ortuño. Respecto a su dimisión, De España indicó: "Ha ocurrido lo que muchos preveíamos que iba a suceder".

Ortuño, según fuentes del PP, acudió ayer al Palau de la Generalitat a formalizar oficialmente su dimisión.