Barcelona regula el aparcamiento en seis distritos más

El asfalto de buena parte de Barcelona se tornará más verde con la extensión de la regulación del aparcamiento más allá de Eixample y Ciutat Vella a partir del mes de octubre. Sólo dos distritos, Nou Barris y Sant Andreu, no entrarán en la regulación que afectará a 24.272 plazas en las que se aparcaba libremente. El perímetro del área que se regulará es, aproximadamente, el del interior del arco que dibuja la Ronda del Mig. Si la presentación de la regulación de las plazas de Eixample y Ciutat Vella en el mes de mayo por los responsables municipales se hizo con importantes dosis de cautela, ay...

El asfalto de buena parte de Barcelona se tornará más verde con la extensión de la regulación del aparcamiento más allá de Eixample y Ciutat Vella a partir del mes de octubre. Sólo dos distritos, Nou Barris y Sant Andreu, no entrarán en la regulación que afectará a 24.272 plazas en las que se aparcaba libremente. El perímetro del área que se regulará es, aproximadamente, el del interior del arco que dibuja la Ronda del Mig. Si la presentación de la regulación de las plazas de Eixample y Ciutat Vella en el mes de mayo por los responsables municipales se hizo con importantes dosis de cautela, ayer, Jordi Hereu, concejal de Seguridad, presentó la segunda fase de la regulación más relajado, casi con el convencimiento de que la experiencia en el centro ha demostrado que la regulación no es la panacea pero obra como una cura paliativa a la congestión del tráfico y al ordenamiento del espacio público.

El área verde ya implantada desde mayo en los dos distritos centrales supuso la regulación de 12.398 plazas. Ahora se sumarán otras 24.272 plazas, con lo que, en total, Barcelona regulará el estacionamiento de 36.670 plazas entre las dos coronas. En esta segunda fase la proporción de plazas de uso exclusivo por los residentes es mayor: aproximadamente algo más de una cuarta parte -7.211- será para los residentes de barrios concretos: Barceloneta, Poble Sec, Camp de l'Arpa y parte de Gràcia, distrito donde además será peatonal buena parte de su eje central.

Si en la primera corona se regularon algo más de 12.000 plazas en un entorno con 80.000 residentes con vehículo censado, a partir de octubre la proporción es de 24.000 plazas para 90.000 residentes con coches.Además de la introducción del área verde, también se incrementan las plazas de zona azul -de 2.287 se pasará a 4.222-, las de carga y descarga -de 2.909 a 3.366- y las de motos en calzada, que son 6.661 y serán 9.398.

La evidencia de los cambios que se introducirán en otoño se verá a partir de esta semana, cuando se iniciará el pintado del asfalto, la colocación de las señalizaciones verticales y la instalación de 1.847 parquímetros nuevos. La segunda corona no entrará en funcionamiento de forma simultánea, sino en tres fases. En la primera, el 3 de octubre, se regulará parte de Sant Martí -la mayoría de las plazas de estacionamiento de ese distrito se libran de la regulación-, Barceloneta y Poble Sec. El 24 de ese mismo mes se incorporarán Sants-Montjuïc y Les Corts -tampoco se trata de todo el distrito, sino de la parte del interior de la Ronda del Mig- y el resto, a partir del 14 de noviembre.

El horario de regulación será el mismo que el de la mayor parte del centro: de lunes a viernes y de ocho de la mañana a ocho de la tarde. Tampoco hay cambios en las tarifas para los residentes: 0,20 céntimos al día o un euro a la semana. Donde sí hay modificaciones es en las tarifas para los no residentes, que pagarán 2,5 euros cada hora con un tiempo máximo de estacionamiento de dos horas en las plazas mixtas.

Para superar las protestas de los comerciantes y de los agentes comerciales, que pretendían las mismas condiciones que los residentes, el consistorio firmó ayer sendos convenios que supone a esos profesionales un descuento del 30% en las tarifas de los abonos de aparcamientos de BSM y la posibilidad de comprar vales con horas de aparcamiento, también con ese mismo porcentaje de descuento, para las plazas mixtas del área verde. La medida puede beneficiar a unos 9.000 comerciantes y a unos 7.000 agentes comerciales. La ampliación del área verde a la segunda corona fue criticada por Jaume Ciurana, concejal de CiU, que recriminó al consistorio la falta de datos de la experiencia del centro.