El Ayuntamiento de Marbella y la Junta dialogan hoy por primera vez sobre el PGOU

Casi mes y medio después de que el redactor del nuevo PGOU de Marbella, Manuel González Fustegueras, entregara el avance del documento, el Ayuntamiento que preside Marisol Yagüe y la Junta se sentarán hoy por primera vez para discutirlo. Tras los habituales dimes y diretes entre ambas administraciones a cuenta del planeamiento urbanístico de la ciudad y varios amagos de convocatoria de reuniones, la mesa de participación social del PGOU se reunirá hoy por la tarde con la asistencia de tres representantes de la Consejería de Obras Públicas y otros tantos del Consistorio.

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Casi mes y medio después de que el redactor del nuevo PGOU de Marbella, Manuel González Fustegueras, entregara el avance del documento, el Ayuntamiento que preside Marisol Yagüe y la Junta se sentarán hoy por primera vez para discutirlo. Tras los habituales dimes y diretes entre ambas administraciones a cuenta del planeamiento urbanístico de la ciudad y varios amagos de convocatoria de reuniones, la mesa de participación social del PGOU se reunirá hoy por la tarde con la asistencia de tres representantes de la Consejería de Obras Públicas y otros tantos del Consistorio.

Además están convocados PP, PA y PSOE, los sindicatos UGT y CC OO, la Confederación de Empresarios de Andalucía y distintas organizaciones.

El convenio suscrito en enero de 2004 entre Ayuntamiento y Junta establecía la creación de este órgano como foro legítimo para los debates del PGOU. Hasta ahora no se ha reunido. Antes de que estuviera ultimado el documento de avance, la Junta alegó que no se sentaría en la misma mesa con un Ayuntamiento que había incumplido sus compromisos sobre respeto a las sentencias judiciales y no concesión de licencias de obras contrarias al plan vigente, de 1986. Y desde que el texto está ultimado por discrepancias en la composición de la mesa.

Profundas discrepancias

La reunión de hoy es un paso importante entre dos instituciones cuyas relaciones están caracterizadas por la desconfianza, pero aún queda mucho camino por andar y, previsiblemente, en el encuentro de hoy quedarán reflejadas las profundas discrepancias.

La Junta ha instado al Ayuntamiento a que apruebe en pleno el documento de avance y a que luego abra un proceso de diálogo social y dé curso a las alegaciones que se presentarán antes de la aprobación definitiva. La alcaldesa quiere hacerlo al revés. El Ayuntamiento de Marbella parte con una ventaja sobre los demás, y es conocer desde el primer momento que la Junta, que es a quien corresponde la aprobación definitiva de los planes municipales, respalda el documento.

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El texto de González Fustegueras fue consensuado con técnicos municipales y autonómicos, pero el aval político sólo lo ha dado la Junta. Yagüe mantiene muchas discrepancias con contenidos del avance, la más destacada es su pretensión de que se legalicen todas las viviendas irregulares construidas en los últimos años, unas 30.000.

El nuevo PGOU establece mecanismos para legalizar entre el 80% y el 85% de las mismas que se han alzado en suelos no reservados para equipamientos públicos y siempre que hubiera a cambio un sistema de compensación, pero entiende que de ninguna manera pueden regularizarse unas 5.000 casas que quedarían fuera de ordenación a expensas de que decidan sobre ellas los tribunales de justicia.

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