Jueces para la Democracia critica a la Junta por la presidencia del TSJA

Jueces para la Democracias, asociación progresista y minoritaria en la carrera judicial, criticó ayer la actitud de la Junta en el proceso de designación del futuro presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA). La Administración andaluza no oculta su respaldo al actual presidente, Augusto Méndez de Lugo, lo que ha irritado a esta asociación, que demanda que la Junta no interfiera en la elección.

El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), el órgano de gobierno de los jueces, tiene que elegir, previsiblemente, el próximo 22 de junio al futuro presidente del TSJA. Al...

Jueces para la Democracias, asociación progresista y minoritaria en la carrera judicial, criticó ayer la actitud de la Junta en el proceso de designación del futuro presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA). La Administración andaluza no oculta su respaldo al actual presidente, Augusto Méndez de Lugo, lo que ha irritado a esta asociación, que demanda que la Junta no interfiera en la elección.

El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), el órgano de gobierno de los jueces, tiene que elegir, previsiblemente, el próximo 22 de junio al futuro presidente del TSJA. Al puesto aspiran tres magistrados: el actual presidente, Augusto Méndez de Lugo, que lleva 10 años en el cargo y que, excepcionalmente, puede tener un tercer mandato; Lourdes Molina, de Jueces para la Democracia y José Antonio Montero, miembro de la Asociación Profesional de la Magistratura, mayoritaria y conservadora en la carrera judicial.

Méndez de Lugo, el gran favorito para esta elección, cuenta con el visto bueno de la Administración autonómica, que valora su gestión en la última década al frente del TSJA. También se ha pronunciado a su favor Juan Carlos Campo, que forma parte de la minoría progresista en el Consejo General del Poder Judicial.

"Sin intromisiones"

Estos apoyos que ha recibido Méndez de Lugo han irritado a Jueces para la Democracia, que ayer envió un comunicado en el que se pronuncia sobre estos apoyos. "Hay que pedir a la Junta que, como mínimo, se mantenga al margen del proceso de designación, que respete el papel que constitucionalmente corresponde los consejeros del Poder Judicial, que deje a estos hacer su trabajo, sin intromisiones ni interferencias", reza el comunicado de la asociación progresista, que ha realizado un balance negativo del mandato de Méndez de Lugo en el TSJA, tildando de "presidencialista" su gestión.

En la nota, Jueces para la Democracia también hace un reproche a Juan Carlos Campo. "Y de los consejeros del CGPJ, sea cual sea el respaldo partidista o asociativo que les permitió llegar al cargo, tenemos derecho a esperar que hagan no lo que los partidos, sino lo que la Constitución y la ciudadanía esperan de ellos, que en el proceso de designación atiendan exclusivamente a los principios de transparencia, objetividad, promoción de la igualdad de género, mérito y capacidad de los aspirantes", afirma la nota.

La asociación progresista afirma que "sólo desde un pragmatismo exacerbado" se pueden entender los pronunciamientos a favor de Méndez de Lugo realizados por la consejera de Justicia, María José López, y por Juan Carlos Campo. La nota reprocha a Méndez de Lugo que no haya expuesto su opinión sobre el conflicto de la Junta con los funcionarios de Justicia o sobre los planes para que los tribunales superiores sean la última instancia judicial en cada comunidad.

La asociación acusa a la Junta de haber seguido "la agenda" de Méndez de Lugo durante su mandato y defiende "una razonable tensión" entre los poderes del Estado.

Por otra parte, el responsable de Justicia de CC OO en Andalucía, José María Vico, manifestó ayer el apoyo de su sindicato a Lourdes Molina, de Jueces para la Democracia, como futura presidenta del Tribunal Superior andaluz. Vico consideró "retrógrada y conservadora" la actuación de Méndez de Lugo y aseguró que en su mandato "no ha hecho nada por la mejora del servicio público".

El dirigente sindical manifestó su "sorpresa" y "desconcierto" ante el apoyo que la "está prestando" a un presidente con "posturas conservadoras".