OPINIÓN DEL LECTOR

Los juegos y la tradición en Almería

El "régimen" -franquista- jamás perdonó que Almería fuera la última ciudad en rendirse al golpe de Estado de Franco. Esto motivó el abandono de nuestra provincia, por revanchismo y conveniencia de unos poderosos enclavados en una economía caciquil, a quienes interesaba seguir la tradición. No fue hasta la llegada de un Gobierno socialista cuando se comenzaron a realizar infraestructuras vitales para el progreso de nuestra ciudad, Universidad, encauzamiento de la Rambla, Paseo Marítimo, autovías, carreteras, institutos. Pero otras cosas sí pueden tener remedio, aunque a tenor de los acontecimie...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El "régimen" -franquista- jamás perdonó que Almería fuera la última ciudad en rendirse al golpe de Estado de Franco. Esto motivó el abandono de nuestra provincia, por revanchismo y conveniencia de unos poderosos enclavados en una economía caciquil, a quienes interesaba seguir la tradición. No fue hasta la llegada de un Gobierno socialista cuando se comenzaron a realizar infraestructuras vitales para el progreso de nuestra ciudad, Universidad, encauzamiento de la Rambla, Paseo Marítimo, autovías, carreteras, institutos. Pero otras cosas sí pueden tener remedio, aunque a tenor de los acontecimientos, difícilmente.

La crisis del PP, que dirige las instituciones más importantes de Almería, está provocando un caos político que puede poner en peligro lo único que nos puede quedar de los Juegos del Mediterráneo, que es el éxito deportivo y organizativo. Acudir a escándalos cada vez mayores, sean propios o ajenos, para ocultar la incapacidad de la que están haciendo gala nuestros gobernantes municipales podía valer en otros tiempos, pero estamos ante un evento en el que no podemos fallar. Quienes dirigen el PP han de poner remedio rápido a una situación que afecta demasiado a una población que no merece hacer el ridículo que parece avecinarse.

La falta de inversiones que provocó que la riqueza de Almería consistiera en mano de obra exportable se ha superado gracias a la imaginación y el tesón de un pueblo que ha superado todas las dificultades, creando una riqueza agrícola que exportamos al mundo entero, no sin dificultades y competencias. Ofrecer una pobre imagen por la falta de capacidad de quienes se dedican a mirarse el ombligo no beneficia para nada a esas familias que viven de exportar la calidad de su trabajo. Poner la venda de crisis políticas, más o menos provocadas, para que sirvan como excusa ante el previsible fracaso organizativo de los Juegos no sólo no nos lo merecemos, sino que si sucediera, no deberíamos perdonarlo.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En