Una muestra fotográfica testimonia la superación de las discapacidades

La sala Amárica ofrece las imágenes del concurso 'Un mundo para todos'

La Sala Amárica de Vitoria abrió ayer sus puertas a las mejores fotografías que se han presentado a la cuarta edición del concurso Un mundo para todos: superación de las discapacidades, organizado por la ONCE. En tontal, son 45 imágenes que ofrecen otra mirada a ese mundo en el que los discapacitados tratan de integrarse a pesar de las dificultades arquitectónicas o sociales que les presenta. La muestra permanecerá abierta hasta el 23 de enero.

El concurso que organiza la ONCE ha adquirido en estas cuatro ediciones una relevancia inusitada en el panorama fotográfico, sobre todo d...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La Sala Amárica de Vitoria abrió ayer sus puertas a las mejores fotografías que se han presentado a la cuarta edición del concurso Un mundo para todos: superación de las discapacidades, organizado por la ONCE. En tontal, son 45 imágenes que ofrecen otra mirada a ese mundo en el que los discapacitados tratan de integrarse a pesar de las dificultades arquitectónicas o sociales que les presenta. La muestra permanecerá abierta hasta el 23 de enero.

El concurso que organiza la ONCE ha adquirido en estas cuatro ediciones una relevancia inusitada en el panorama fotográfico, sobre todo desde que se abrió la participación a toda Europa hace dos años. La calidad de las obras se aprecia en la muestra que se presenta desde ayer en la sala Amárica. En las imñagenes recogidas, el deporte, la vida cotidiana y las barreras arquitectónicas son tan protagonistas como los propios discapacitados.

Así se refleja en la foto An. M., con la que Santi Viladrich (Manresa, Barcelona) obtuvo el primer premio con 1.500 euros, en la que la protagonista es una niña que juega al baloncesto en silla de ruedas; o en el segundo premio, del guipuzcoano Fernando Oregi, una poderosa imagen titulada precisamente Barreras arquitectónicas, que muestra con gran fuerza expresiva la rotundidad de las escaleras frente a la silla de ruedas. Los necesitados de este vehículo protagonizan también la foto del tercer premio, del gaditano Juani Rangel, El estrecho, donde un discapacitado pesca tranquilamente en la bají de Algeciras, excelente muestra de que la superación de las discapacidades pueden ser muchas veces placenteras.

En este sentido, la selección de imágenes que conforman la exposición apuesta por la alegría frente al sufrimiento. Incluso hay apuntes irónicos, como los del fotógrafo británico Jan Miskovic, quien en sus dos imágenes tituladas On my eyes juega con la visión de un edificio bien enfocado o desenfocado, en función de si lleva puestas sus gafas de lentes gruesos o no en el momento de realizar las fotografías.

Javier Domínguez, presidente del Consejo Territorial de la ONCE en el País Vasco, quiso destacar las aportaciones al concurso de discapacitados y afiliados a su organización, con los dos accésits a la británica Shirley Britton y a la guipuzcoana Idoia Basalo.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En