"La Iglesia también ha cedido en Cajasur"
José Antonio Ruiz Almenara (1956, Palma del Río) es el secretario general del PSOE de Córdoba. Su partido ha estado casi cinco años en confrontación con Miguel Castillejo, el sacerdote que preside Cajasur. El acuerdo alcanzado entre el consejero de Economía, José Antonio Griñán, y el obispo de Córdoba, Juan José Asenjo, parece que terminará con esta etapa.
Pregunta. ¿Se cierra el problema de Cajasur con la aprobación por parte del Consejo de Administración del regreso a la tutela autonómica?
Respuesta. Lo que se termina es una etapa de desencuentro y de conflictos e...
José Antonio Ruiz Almenara (1956, Palma del Río) es el secretario general del PSOE de Córdoba. Su partido ha estado casi cinco años en confrontación con Miguel Castillejo, el sacerdote que preside Cajasur. El acuerdo alcanzado entre el consejero de Economía, José Antonio Griñán, y el obispo de Córdoba, Juan José Asenjo, parece que terminará con esta etapa.
Pregunta. ¿Se cierra el problema de Cajasur con la aprobación por parte del Consejo de Administración del regreso a la tutela autonómica?
Respuesta. Lo que se termina es una etapa de desencuentro y de conflictos en la que Cajasur inició un proceso para no estar bajo la tutela de la Junta de Andalucía sino del Gobierno central. Lo que se cierra es un periodo que no ha sido óptimo ni para las instituciones ni para la entidad.
"Los conflictos hay que cerrarlos lo mejor posible, y es lo que se ha hecho"
"Castillejo es la figura que ha tenido más capacidad de influencia en Córdoba"
P. La solución ha venido de la negociación...
R. Creo que cuando se abre una brecha de desencuentro hay que llegar al encuentro y lo han hecho posible fundamentalmente dos actores: la Junta de Andalucía y la Iglesia, José Antonio Griñán y el obispo de Córdoba. Ambos han mostrado un talante generoso y hay que felicitarlos.
P. ¿Se hubiese conseguido el mismo resultado a través de los tribunales?
R. A través de los tribunales nunca se sabe. Entendemos que sí se puede obtener, pero al final, se deja en manos de todo un procedimiento judicial, de conflictos, que creo que sangraría muchísimo los intereses y las relaciones institucionales y que a la postre estaríamos en una situación de interinidad que no sería buena para una entidad financiera. Los conflictos hay que cerrarlos lo antes posible, lo mejor posible, y es lo que se ha hecho. Hay algo que siempre tengo en mente cuando se negocia: nunca el juego es de suma cero, sino que ambas partes tienen que salir ganando, aquí gana la Iglesia y aquí gana también la Junta de Andalucía.
P. Sin embargo, la impresión que queda es que la Junta ha cedido más que la Iglesia.
R. La Iglesia también ha cedido. Todo es relativo. Si lo comparamos con la situación de hace unas semanas, la Junta de Andalucía gana muchísimo y la Iglesia bastante menos. Si nos retrotraemos a antes de iniciar todo este litigio, la Iglesia ha ganado más y la Junta menos. Creo que en el cómputo general hay unos equilibrios razonables con los que ambas instituciones han ganado.
P. La Junta ha cedido, la Iglesia ha cedido y ¿Castillejo ha cedido?
R. Según el acuerdo, se tiene que marchar. Por tanto, también ha cedido ahí. El acuerdo establece que se tiene que marchar a los 75 años y Castillejo en todas sus manifestaciones había dicho que seguiría mientras Dios le diese salud, de una forma vitalicia.
P. Pero se reforma la Ley andaluza de Cajas para adaptarla a la jubilación del sacerdote a los 75 años...
R. Sí se contemplará como excepción. Tiene cierta lógica porque los ritmos de edad en la Iglesia son muy distintos a los nuestros.
P. ¿El objetivo que se ha perseguido con la negociación es que Castillejo saliera de Cajasur?
R. No. Para nosotros Castillejo es alguien con quien no estábamos de acuerdo, pero realmente jamás hemos mantenido nada en contra de la persona, sino con su forma de actuar. Nuestra actitud nunca ha sido de revancha. El objetivo era darle estabilidad a Cajasur, que fuese democrática, que fuese una entidad profesionalizada y que se centre en la rentabilidad económica y que también tenga una obra social. Entendíamos que Castillejo no hacía esa función adecuadamente.
P. ¿Castillejo se irá en noviembre?
R. Eso es lo que está firmado por la Iglesia. Hay quien plantea que este acuerdo no vincula a Cajasur, pero si fuera así sería una contradicción. Si la Iglesia no tiene potestad jurídica para hacer cumplir el acuerdo, realmente Cajasur no tiene esa singularidad con relación a la Iglesia. No tendría esa singularidad con respecto a la Iglesia, la tendría con personas, entonces, hablaríamos ya de privilegios.
P. ¿Castillejo se irá con su póliza?
R. La póliza está sometida a un litigio y a nosotros no nos queda otra opción que acatar la decisión judicial. No me consta que la póliza fuese objeto de negociación.
P. Sin embargo, ustedes pusieron el grito en el cielo cuando se conoció que Castillejo cobraría de forma vitalicia, al menos, 210.000 euros al año...
R. Sí, fue el detonante o el reflejo de cómo se hacían las cosas en Cajasur. Muchísimas personas se quedaron impresionadas de la actitud y de la forma de funcionar que se tenía.
P. El PP ha insinuado que Cajasur se politizará.
R. Todo lo que se ha conseguido va en beneficio de lo social, de las instituciones públicas, nunca en beneficio de un partido. A nosotros, desde una actitud puramente partidista, nos daba igual que el control de Cajasur fuese del Gobierno central o de la Junta, porque en ambos sitios gobernamos.
P. La Iglesia, con el acuerdo alcanzado, también tiene la potestad para nombrar al sucesor, ¿el PSOE tiene alguna preferencia?
R. No. Se debe respetar a las personas que están trabajando por lo que creo que en estos momentos no se debe hablar de personas de futuro. No es bueno para la entidad. En su momento, a mí no me cabe la duda de que las personas que se propondrán por las instituciones van a ser positivas. Creo que a la Iglesia no le conviene unir el mensaje de Cristo con el dinero y con escándalos. Sabrán hacer bien las cosas.
P. ¿Espera que la Iglesia dialogue con la Junta sobre la sucesión?
R. Sí, es bueno que haya diálogo y no me cabe la duda de que lo habrá.
P. ¿Y se ha hablado ya?
R. Por lo que yo sé, no hay nada decidido sobre nombres.
P. El alcalde de Palma del Río, Salvador Blanco, ¿tendrá un papel importante dentro de Cajasur?
R. Creo que estará en la Comisión de Control en breve y realizará un buen trabajo en este momento clave. Tiene unos amplios conocimientos sobre Cajasur y unas buenas relaciones también con la Iglesia.
P. Respecto a la cuota que tendrá la Diputación de Córdoba, ¿están satisfechos?
R. El presidente de la Diputación está satisfecho de que se tenga la vicepresidencia ejecutiva y además el 10% del Consejo de Administración. Hay capacidad de maniobra.
P. ¿El PSOE podría haber alcanzado la alcaldía de Córdoba con la oposición directa de Castillejo?
R. Yo tampoco puedo culpar de todo a Castillejo. Castillejo tiene poder y capacidad en esta ciudad, pero tampoco podemos achacarle todos lo males, y menos los males del PSOE.
P. Sin embargo, la influencia de Castillejo se nota en la vida económica, en la social, en la cultural...
R. Sí, en todo tiene influencia. Aunque no le podemos otorgar todo ese poder con relación al PSOE. Pero sí hay que reconocer que Castillejo tiene mucho que decir en esta ciudad porque tiene Cajasur y la ha gobernado de una forma muy personal. Es la figura que más capacidad de influencia ha tenido en la ciudad, por encima de la alcaldía de Córdoba.
P. ¿Desde fuera de Córdoba se puede entender el poder de Castillejo?
R. Quienes constatan bien la fuerza o el poder de Castillejo son las personas que vienen de fuera. Los que viven en Córdoba están adaptados y acostumbrados. Quienes están fuera no se creen la situación, pero quienes vienen sí lo perciben. Al final, la gente de aquí se acopla y pierde energía para hacer que la ciudad evolucione.