En Embajadores
Es una vergüenza el estado en el que se quedan los domingos por la tarde las calles que rodean el antiguo edificio de la Tabacalera, en la glorieta de Embajadores.
A partir del mediodía, los comerciantes extienden trapos y cartones para mostrar su mercancía, que es de lo más variopinta, por llamarlo de alguna manera.
Se entremezclan vasos rotos, ropa más que vieja, electrodomésticos de dudosa procedencia, y de repente, se ve un grupo con múltiples teléfonos móviles, cámaras digitales, objetos de oro...
Invaden las aceras y los vecinos no podemos ni salir a la calle,...
Es una vergüenza el estado en el que se quedan los domingos por la tarde las calles que rodean el antiguo edificio de la Tabacalera, en la glorieta de Embajadores.
A partir del mediodía, los comerciantes extienden trapos y cartones para mostrar su mercancía, que es de lo más variopinta, por llamarlo de alguna manera.
Se entremezclan vasos rotos, ropa más que vieja, electrodomésticos de dudosa procedencia, y de repente, se ve un grupo con múltiples teléfonos móviles, cámaras digitales, objetos de oro...
Invaden las aceras y los vecinos no podemos ni salir a la calle, por no comentar que nadie del barrio tiene visitas, ya que mucha gente no se atreve a venir por esta zona.
Hemos avisado en diversas ocasiones a la Policía Municipal, que dice conocer el problema, pero que no se puede hacer nada para resolverlo.
Cuando cae la tarde, viene el Selur y emplea horas en limpiar toda la mercancía que incomprensiblemente dejan tirada por todas las calles.