Felicitación
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha condenado a España por su pasividad ante la invasión sonora desde los locales nocturnos de un barrio de Valencia. La defensa del derecho a la vida privada y a la inviolabilidad del domicilio es una buena noticia, sobre todo, en estos tiempos en que las operadoras realizan un despliegue mediante estrategias de ocultación y camuflaje de antenas e infraestructuras de telefonía móvil.
La actitud perseverante de Pilar Moreno es un ejemplo a seguir en aras a conseguir una sociedad civil dinámica que recuerde a los políticos que su misión no es la pro...
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha condenado a España por su pasividad ante la invasión sonora desde los locales nocturnos de un barrio de Valencia. La defensa del derecho a la vida privada y a la inviolabilidad del domicilio es una buena noticia, sobre todo, en estos tiempos en que las operadoras realizan un despliegue mediante estrategias de ocultación y camuflaje de antenas e infraestructuras de telefonía móvil.
La actitud perseverante de Pilar Moreno es un ejemplo a seguir en aras a conseguir una sociedad civil dinámica que recuerde a los políticos que su misión no es la protección de clientelas y corporaciones globales, sino activar la dimensión moral de la política al servicio de los ciudadanos.