El triunfo de una vecina contra la publicidad

Una vecina de Carabanchel ha logrado, tras dos años de batalla, que su reclamación sea atendida. María del Pilar Gómez García escribió en 2002 al Congreso quejándose de que a pocos metros de un colegio había un gran cartel de una bebida alcohólica. La petición fue desempolvada el pasado julio por Manuel Marín, presidente del Congreso, que la envió al Ayuntamiento. Éste retiró el cartel el pasado día 11.

María del Pilar Gómez García es lo que podría llamarse una vecina ejemplar. Esta mujer residente en el barrio de Carabanchel se anticipó a la aprobación de la ley antibotellón de ...

Una vecina de Carabanchel ha logrado, tras dos años de batalla, que su reclamación sea atendida. María del Pilar Gómez García escribió en 2002 al Congreso quejándose de que a pocos metros de un colegio había un gran cartel de una bebida alcohólica. La petición fue desempolvada el pasado julio por Manuel Marín, presidente del Congreso, que la envió al Ayuntamiento. Éste retiró el cartel el pasado día 11.

María del Pilar Gómez García es lo que podría llamarse una vecina ejemplar. Esta mujer residente en el barrio de Carabanchel se anticipó a la aprobación de la ley antibotellón de 27 junio de 2002: un mes antes, cuando ésta estaba en tramitación, envió un escrito a la Comisión de Peticiones del Congreso de los Diputados, siendo presidenta de la Cámara Luisa Fernanda Rudi (Partido Popular), en la que solicitaba la retirada de un enorme cartelón publicitario de una bebida alcohólica, próximo a su casa. La vecina argumentó que el anuncio llevaba expuesto años y años, sin cambiar el motivo de la publicidad.

El cartel publicitario estaba situado entre los números 126 y 128 de la calle de General Ricardos, en las proximidades de un centro escolar, zona por la que pasaban cada día un gran número de menores.

Un mes después, la Comisión de Peticiones del Congreso acordó, tras examinar la solicitud de María del Pilar, trasladar su reclamación al Ayuntamiento de Madrid. Pero fue el pasado mes de julio cuando el presidente de la Cámara baja, Manuel Marín (PSOE), hizo un nuevo requerimiento a la Administración local, concretamente a la Junta Municipal de Distrito de Carabanchel, a donde había ido a parar el escrito de María Pilar.

La concejal de Medio Ambiente, Paz González, tuvo noticias de este caso en los primeros días del pasado octubre y dio orden de iniciar un expediente. "La reclamación de esta ciudadana fue atendida con toda la celeridad posible cuando tuvimos conocimiento de ella. Estaba en la junta de distrito y no sabemos cómo pudo llegar hasta allí", según Fernanda Serrano, directora general de Vías Públicas y Equipamientos Urbanos. "Los inspectores comprobaron que había un anuncio de alcohol en la calle que inclumplía la ley antibotellón, que dice que no se puede anunciar el tabaco y el alcohol allí donde no se puede consumir", agrega.

Reacción

La concejal tomó entonces la decisión de retirar el anuncio. Para ello, el Ayuntamiento se dirigió a la empresa concesionaria responsable del anuncio, Clear & Chanel, que lo quitó en sólo 24 horas. "No fue necesario dar traslado de este caso a la Comunidad de Madrid porque esta empresa reaccionó rápidamente", explica Serrano.

El anuncio aparecía en una valla propiedad del Ayuntamiento. "Se trata de un contrato muy viejo en el tiempo que estamos a punto de resolver", explica Serrano. "Ese anuncio, en concreto, pertenecía a un pago en especies de ese acuerdo y no teníamos información de él porque efectivamente estaba puesto antes de que entrara este equipo municipal. La vecina de Carabanchel tenía razón con su reclamación".

El Ayuntamiento de Madrid, según la ordenanza, no tiene posibilidades legales de proceder a la retirada de esta publicidad si las empresas anunciantes no lo hacen tras serles comunicadas su situación de irregularidad al incumplir la Ley de Drogodependencias y otros Trastornos Adictivos de la Comunidad (ley antibotellón). Es el Gobierno regional quien tiene potestad para ejecutar esta retirada. "En este caso no fue necesario", explica Serrano, "porque en 24 horas la valla se quitó".

La Concejalía de Medio Ambiente ha reforzado en los últimos meses las inspecciones para evitar este tipo de publicidad de bebidas alcohólicas, pero la tarea es complicada. "Por eso", señala Serrano "agradecemos la colaboración de esta ciudadana, y animamos a todos los que vean este tipo de anuncios a que se pongan en contacto con nosotros para que actuemos".