Montilla estudia ceder la distribución eléctrica a las comunidades
El Ministerio de Industria está estudiando traspasar todas las competencias de distribución eléctrica a las comunidades autónomas. Un portavoz oficial del ministerio afirmó ayer que es una idea sobre la que está "reflexionando" el ministro José Montilla, pero matizó que se trata de un proceso "muy complicado a nivel normativo", por lo que no estará listo "antes de medio año".
En cualquier caso, añadió el portavoz, el ministerio no creará ningún organismo regulador nuevo, sino que se limitará a traspasar los poderes y que cada comunidad autónoma los ejecute como quiera. El consejero de T...
El Ministerio de Industria está estudiando traspasar todas las competencias de distribución eléctrica a las comunidades autónomas. Un portavoz oficial del ministerio afirmó ayer que es una idea sobre la que está "reflexionando" el ministro José Montilla, pero matizó que se trata de un proceso "muy complicado a nivel normativo", por lo que no estará listo "antes de medio año".
En cualquier caso, añadió el portavoz, el ministerio no creará ningún organismo regulador nuevo, sino que se limitará a traspasar los poderes y que cada comunidad autónoma los ejecute como quiera. El consejero de Trabajo e Industria de la Generalitat catalana, Josep Maria Rañé, reclamó ayer al Gobierno central plenas competencias en la distribución para crear un organismo regulador que fije la parte de la tarifa eléctrica que corresponde a la distribución, alrededor del 15%.
Actualmente, las comunidades tienen algunas competencias en la distribución eléctrica, que en la práctica se limitan a la supervisión de la red, mientras que el Gobierno se reserva la capacidad para fijar las bases del sistema. Esta división de poderes se traduce en que la capacidad de los gobiernos regionales se ciñe a la imposición de sanciones, pero la tarifa la controla el Ejecutivo. El resultado es que ni se supervisa ni se controla que las compañías eléctricas inviertan, allí donde deben, el dinero que reciben.
Rañé espera así poder influir en la mejora de la calidad del servicio en Cataluña, que es, junto a Andalucía y Valencia, una de las comunidades más afectadas por los apagones. La duda que se plantea es si las comunidades podrán elevar el recibo de la luz.