Retenciones kilométricas en la segunda jornada de la operación salida en las carreteras catalanas
La segunda jornada de la operación salida se saldó con dos accidentes mortales que causaron colas kilométricas en las carreteras catalanas. Un accidente en la autopista AP-7 a la altura de Tarragona originó retenciones durante más de siete horas y colas de hasta 35 kilómetros en sentido Valencia. El habitualmente elevado flujo de vehículos en sábado que dejan el área metropolitana de Barcelona para pasar el fin de semana en Tarragona se vio condicionado por la salida de la vía de un turismo a las 7.30 horas, en un accidente que causó un muerto y obligó incluso a cortar totalmente el tráfico. E...
La segunda jornada de la operación salida se saldó con dos accidentes mortales que causaron colas kilométricas en las carreteras catalanas. Un accidente en la autopista AP-7 a la altura de Tarragona originó retenciones durante más de siete horas y colas de hasta 35 kilómetros en sentido Valencia. El habitualmente elevado flujo de vehículos en sábado que dejan el área metropolitana de Barcelona para pasar el fin de semana en Tarragona se vio condicionado por la salida de la vía de un turismo a las 7.30 horas, en un accidente que causó un muerto y obligó incluso a cortar totalmente el tráfico. En Lleida, un motorista de 27 años murió en el kilómetro 1,8 de la carretera L-801, muy cerca de la capital ilerdense.
El accidente de Tarragona causó un colapso monumental desde las 10.00 hasta las 13.30 horas entre las poblaciones de El Vendrell y Tarragona. Según informó el Servicio Catalán de Tráfico, la congestión de la AP-7 derivó hacia la N-340, que presentó hasta 11 kilómetros de retenciones a la una del mediodía entre Altafulla y Tarragona. De hecho, a causa del accidente en la AP-7, los Mossos d'Esquadra tuvieron que cortar desde las 8.00 horas uno de los dos carriles para retirar el vehículo siniestrado y limpiar la vía, que no quedó libre hasta el mediodía. Pero a esta hora la acumulación de tráfico fue tal, que en el peaje de El Vendrell los vehículos cruzaban las barreras y se encontraban ya totalmente parados. En el momento más crítico hubo retenciones de 35 kilómetros entre L'Arboç del Penedès y Tarragona.La de ayer fue, con toda probabilidad, la jornada más complicada en las carreteras de Tarragona en lo que va de año, después de una Semana Santa tranquila y de pequeñas retenciones el primer día de puente de cuatro días de Sant Joan. La autopista AP-7 entre El Vendrell y Tarragona fue el punto negro en las carreteras catalanas, aunque también se registraron retenciones importantes en Montmeló.
En la misma autopista AP-7, en sentido Girona y entre Montmeló y el peaje de La Roca, se registraron nueve kilómetros de retenciones entre las 12.15 horas y las 13.15. Otra incidencia de menor envergadura sucedió en la C-31, a la altura de Sitges, donde un vehículo averiado causó un kilómetro de colas y obligó a los Mossos d'Esquadra a dar paso alternativo entre las 10.15 y las 11.45 horas.
El Servicio Catalán de Tráfico informó asimismo de un choque frontal entre dos vehículos que obligó a cortar la carretera local de Girona GI-614, a la altura de Roses, en un accidente que registró un herido grave y afectó a la carretera durante casi una hora.
Los Mossos d'Esquadra detuvieron en la madrugada del viernes a David R. J., de 26 años y vecino de L'Hospitalet de Llobregat, como presunto autor de un delito de conducción temeraria, por conducir bajo los efectos del alcohol y originar un grave riesgo para la circulación. El joven originó un accidente en Vilanova i la Geltrú, señalan fuentes policiales.
Problemas en Renfe
La huelga del personal de circulación de Renfe dificultó también el desarrollo de la operación salida. El paro, convocado por la CGT -sindicato minoritario en la empresa pública ferroviaria, pero con representación en el comité de empresa- y el sindicato SCF, redujo el tráfico ferroviario en un 40% en los trenes de Cercanías, aunque los trenes regionales y de largo recorrido circularon en un 80%, según fuentes sindicales. No se produjeron incidentes y los servicios mínimos funcionaron con normalidad.