150 nuevos funcionarios desarmados regularán el tráfico desde el lunes

La policía acompañará durante un mes a los agentes de movilidad

El próximo lunes, 21 de junio, estarán en la calle los primeros 148 "agentes de movilidad": funcionarios no armados que deben sustituir antes de fin de año a la Policía Municipal en las labores de regulación del tráfico en cruces y semáforos. El nuevo cuerpo lo compondrán, cuando esté formado dentro de seis meses, 700 personas elegidas entre las más de 5.500 que optan a las pruebas de selección; hasta que eso ocurra, el cambio se limitará a la presencia de 148 interinos, que trabajarán en prácticas -acompaña-dos por policías municipales- hasta el próximo 18 de julio y después se harán plenamen...

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El próximo lunes, 21 de junio, estarán en la calle los primeros 148 "agentes de movilidad": funcionarios no armados que deben sustituir antes de fin de año a la Policía Municipal en las labores de regulación del tráfico en cruces y semáforos. El nuevo cuerpo lo compondrán, cuando esté formado dentro de seis meses, 700 personas elegidas entre las más de 5.500 que optan a las pruebas de selección; hasta que eso ocurra, el cambio se limitará a la presencia de 148 interinos, que trabajarán en prácticas -acompaña-dos por policías municipales- hasta el próximo 18 de julio y después se harán plenamente cargo del tráfico en ciertos puntos del centro urbano. Por ejemplo, en la Puerta del Sol.

Los agentes de movilidad harán el mismo trabajo que un policía municipal, pero por menos dinero: cobrarán 17.200 euros brutos anuales, 8.000 euros menos que los policías de tráfico. Actualmente, la Subinspe-cción de Tráfico de la Policía Municipal tiene 1.200 agentes, y los agentes de movilidad -que teóricamente vienen a liberar a los policías para que éstos se dediquen a la lucha contra la delincuencia- van a ser sólo 700. Pero según dijo ayer el concejal de Seguridad, Pedro Calvo, eso no significa que 700 personas tengan que hacer el trabajo que hasta ahora hacen 1.200, porque "algunos trabajos relacionados con el tráfico seguirán en manos de la Policía Municipal".

El Ayuntamiento aprobó la constitución del cuerpo de agentes de movilidad el pasado abril, y un mes después recibió 5.976 solicitudes para formar parte de él, aunque 500 fueron desestimadas. Esos 5.476 ciudadanos (un 90%, hombres), más los 148 interinos que empiezan a trabajar el próximo lunes, se presentarán a las oposiciones, que comienzan hoy con el examen psicotécnico y terminarán en agosto con un cuestionario teórico y cuatro pruebas físicas. Después tendrán que pasar un curso de formación y un mes de prácticas. A partir de entonces, los 700 elegidos serán funcionarios de carrera y sustituirán a la policía en el control del tráfico.

Los agentes de movilidad no irán armados, pero tendrán carácter de agente de la autoridad, esto es, podrán imponer sanciones. Vestidos con unos uniformes azules y amarillos y en horario (por turnos) de 7.00 a 22.30, vigilarán y regularán la circulación en los 21 distritos. Eso sí, el concejal Pedro Calvo advirtió de que la Policía Municipal, aunque en teoría se libera de esa labor, conserva su deber de garantizar la movilidad: si un ciudadano quiere denunciar una infracción y tiene a un policía cerca, podrá pedirle ayuda y éste deberá atenderlo.

Plazos

Calvo subrayó que "el número de solicitudes ha sido el doble de lo previsto", y utilizó ese argumento para sugerir que el cuerpo "podría" no estar listo en los plazos a los que él se comprometió: antes de fin de año. También puntualizó que algunas tareas de tráfico seguirán atendidas por la policía, como los avisos de ciudadanos requiriendo la presencia de la grúa, la escolta a comitivas o el corte de calles al tráfico ante circunstancias excepcionales.

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Los agentes de movilidad no son bien vistos ni entre los sindicatos policiales ni entre la oposición política. Javier Payar, de la Unión de Policía Municipal (UPM), califica de "chapuza" la constitución del nuevo cuerpo y condena que se contrate a interinos para estos primeros meses: "Esas personas tendrán acceso a datos de la policía, cuando creemos que no deberían, y además tendremos que darles nosotros la formación que no tienen", afirma Payar.

Miguel Ángel Alonso, del Colectivo Profesional de Policía Municipal (CPPM), coincide en la crítica: "Esto es un injerto del señor [Alberto] Ruiz-Gallardón. Lo que tendría que hacer es contratar a más policías, no poner a trabajar a interinos. Y, además, va a ser inoperante, porque los ciudadanos, al ver a estos agentes uniformados, les requerirán para otros servicios como agresiones, hurtos, problemas de todo tipo que se producen en la vía pública, y ellos no podrán intervenir porque no están armados ni capacitados", dice Alonso.

El concejal socialista Óscar Iglesias apoya la reclamación sindical para crear más plazas de policías y no de funcionarios desarmados, porque "cuando un policía realiza funciones de trafico al mismo tiempo está evitando que se comentan delitos con su presencia o combatiéndolos". Julio Misiego, de IU, mostró también ayer su preocupación por el hecho de que los nuevos agentes "no tengan competencias en materia de seguridad cuando se van a encargar de regular un tema que genera tantos conflictos como la seguridad vial".

El 'bordillo-bus', en julio

Un bordillo de hormigón con forma de ala de tiburón empezará a ser colocado a mediados de julio en los carriles-bus de varias calzadas del centro de Madrid, empezando por el paseo de las Delicias.

Lo anunció ayer Pedro Calvo, concejal de Seguridad, que no quiso precisar en qué calles ni a lo largo de cuántos kilómetros se colocará el nuevo invento del área de Movilidad. El bordillo fue presentado el pasado enero por el propio Calvo como solución para hacer respetar el carril-bus, ahora invadido por los vehículos privados, y favorecer así la fluidez del tráfico. Pero no es una idea del equipo de Alberto Ruiz-Gallardón: un bordillo similar fue colocado por el entonces gobierno municipal socialista a finales de los años ochenta en varias calles, y retirado por José María Álvarez del Manzano, del PP, nada más acceder a la alcaldía en 1991. Los populares consideraban entonces "muy peligrosa" esa separación física del carril-bus.

En estos seis meses la propuesta de Calvo ha introducido variaciones: el reborde superior del bordillo llevara una banda "captafaros" que se iluminará con las luces de los coches por la noche para evitar que los vehículos choquen contra él.

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