Camps sugiere que el decreto del PSOE contra el trasvase se asemeja al de Nueva Planta

El presidente de la Generalitat, Francisco Camps, sugirió ayer, aunque sin mencionarlo expresamente, que el decreto de paralización del trasvase del Ebro anunciado por el nuevo Gobierno del PSOE se asemeja con el de Nueva Planta, que supuso la supresión de los Fueros Valencianos. 24 horas después de conocer de boca de la ministra de Medio Ambiente el plan alternativo al trasvase, Camps pidió la unidad de los valencianos en favor de esta obra y subrayó que el conjunto de medidas ministeriales son complementarias al trasvase del Ebro, no una alternativa al mismo.

Apenas 24 horas después d...

El presidente de la Generalitat, Francisco Camps, sugirió ayer, aunque sin mencionarlo expresamente, que el decreto de paralización del trasvase del Ebro anunciado por el nuevo Gobierno del PSOE se asemeja con el de Nueva Planta, que supuso la supresión de los Fueros Valencianos. 24 horas después de conocer de boca de la ministra de Medio Ambiente el plan alternativo al trasvase, Camps pidió la unidad de los valencianos en favor de esta obra y subrayó que el conjunto de medidas ministeriales son complementarias al trasvase del Ebro, no una alternativa al mismo.

Apenas 24 horas después de su reunión con la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, donde conoció junto al presidente de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, el paquete de medidas alternativas y urgentes al trasvase del Ebro, Camps reunió la tarde de ayer en el Palau de la Generalitat a los dirigentes de la patronal, de las cámaras de comercio, de la feria, de la federación de regantes y de las organizaciones agrarias para trasladarles su opinión sobre la alternativa socialista. Acompañaron al presidente los consejeros de Infraestructuras, de Territorio y de Agricultura, José Ramón García Antón, Rafael Blasco y Gema Amor, respectivamente.

Al término del encuentro, que duró cerca de una hora y media, el presidente de la Generalitat definió "los tres folios" que recibió el jueves de Narbona de "que no es más que la suma de las inversiones complementarias incluidas en el PHN y su anexo". Con esta idea de fondo, Camps apeló a la unidad de todos los valencianos en defensa del trasvase del Ebro "por encima de color político de cada uno". El presidente echó la vista atrás y recordó los "peajes que ha pagado esta comunidad a los gobiernos socialistas: mucho paro, falta de inversiones...". "Los valencianos estamos hartos de pagar peajes a los gobiernos socialistas", prosiguió Camps, quien consideró "un insulto" el anunciado decreto de paralización del trasvase del PSOE, "y la antesala de más agresiones a esta comunidad autónoma".

Casi al final de su comparecencia pública y sin mencionarlo expresamente, el presidente de la Generalitat comparó el decreto-ley que derogará el trasvase con el de Nueva Planta, por el rey Felipe V en 1707 y que suprimió los Fueros Valencianos. "Se asemeja a otros en los que se dice que no tenemos derecho a algo que tenemos derecho", subrayó.

Camps insistió en la unidad de todos los valencianos, "y también de los murcianos y andaluces" en defensa del canal si bien no concretó en que fructificará esa unión de la sociedad civil a la que ayer apelaba. Sí dejó entrever que más adelante se plantearían iniciativas en defensa del "agua para todos".

El presidente de la Generalitat confirmó su próxima entrevista el miércoles con su homólogo de Murcia para seguir coordinando la defensa del trasvase. De los informes jurídicos que la Generalitat está preparando para hacer frente a la paralización del trasvase, Camps dijo que en unos días se conocerán nuevos datos. Pero con respecto a la propuesta planteada por Narbona fue claro: "Estaba esperando, de buena fe, conocer la propuesta alternativa del Gobierno de España al trasvase, y la alternativa es hacer parte del plan [del PHN]. Es una tomadura de pelo", resumió Camps.

En relación a la visita que la ministra hará la próxima semana a Bruselas para hablar de la nueva política hídrica socialista, el presidente calificó de "grave" que "una ministra se vaya a Bruselas y diga que lo que han negociado gobiernos anteriores, no vale, poniendo en peligro la financiación europea".