VISTO / OÍDO

Lo que nos debe

No sé qué podrá hacer Zapatero cuando gobierne; él tampoco. Nadie va a tomar en cuenta sus promesas. Todo el que llega a algo imaginando lo que va a hacer hace sólo lo que puede: desde el barrendero al que dan un trozo de calle y quiere que reluzca hasta el César Imperator. Quien quiera hacer lo que quiera no tiene más remedio que ser Dios: si lo consigue es para advertir que no existe. Como Aznar, que cuando resucita del silencio encuentra otra vez el mismo Rajoy, el mismo Acebes, el mismo Zaplana: cuando Lázaro volvió y estaban otra vez allí Marta y María, y el misterioso chico de Galilea: d...

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No sé qué podrá hacer Zapatero cuando gobierne; él tampoco. Nadie va a tomar en cuenta sus promesas. Todo el que llega a algo imaginando lo que va a hacer hace sólo lo que puede: desde el barrendero al que dan un trozo de calle y quiere que reluzca hasta el César Imperator. Quien quiera hacer lo que quiera no tiene más remedio que ser Dios: si lo consigue es para advertir que no existe. Como Aznar, que cuando resucita del silencio encuentra otra vez el mismo Rajoy, el mismo Acebes, el mismo Zaplana: cuando Lázaro volvió y estaban otra vez allí Marta y María, y el misterioso chico de Galilea: después se volvió a morir para siempre: qué entropía. A Zapatero nadie le va a pedir que cumpla todo, excepto los que desean que no lo cumpla para demostrar su poquedad, al mismo tiempo que hacen lo posible para impedírselo, pequeños diablos (algunos dicen que la entropía es la prueba de que existe el diablo).

Se sabe lo que se puede y lo que se quiere. Pero algunas cosas sí se quieren: se necesitan y se vota por ellas. Una muy clara es que se vota para que el Gobierno tenga un aire de izquierdas, una canción de libertad. Parece que el motivo inminente de su elección es la retirada de Irak, que había prometido desde antes del atentado y en la que se ha reafirmado. Será muy dificil: ya está Powell pisando aquí aparentemente para un funeral en la Almudena (podría haber sido una ceremonia ecuménica; pero esta Iglesia cree que las otras son falsas), pero es para seguir machacando en el yunque de la guerra. ¡El tramposo! Es el que enseñó un tubito de ensayo al Senado para probar que Sadam tenía las armas químicas: y no las tenía, y él lo sabía. Aznar cayó al fondo del pozo por la entrada de la guerra en España y por cómo se tapó los ojos para no verla. ZP ha prometido poner en marcha los valores sociales perdidos: no sé lo que podrá, pero si no lo intenta caerá. Y tendrá que dar pensión de viudedad al supérstite de una pareja de hecho. Y... Todo lo que busca, todo lo que se necesita. (Supérstite: que sobrevive. Entropía: medida del desorden de un sistema). No pedimos que lo haga todo: pero sí lo que nos debe.

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