Un divertido e inteligente libro lleno de información

El periodista Alfredo Valenzuela (Lopera, Jaén, 1962) acaba de publicar Entrevistas con los vampiros en RD Editores. Los vampiros no siempre vienen de Transilvania. Hay algunos especímenes a los que caracteriza la pasión por la escritura. En unos casos, publican novelas de éxito y se llaman Mario Vargas Llosa, Guillermo Cabrera Infante o Javier Cercas; en otros, el vínculo de estos vampiros con la literatura es un poco más lejano, como ocurre con satélites de la prensa del corazón o de las vísceras. Hablamos de Jimmy Giménez-Arnau o Boris Izaguirre.

Todos ellos -y así hasta medio...

El periodista Alfredo Valenzuela (Lopera, Jaén, 1962) acaba de publicar Entrevistas con los vampiros en RD Editores. Los vampiros no siempre vienen de Transilvania. Hay algunos especímenes a los que caracteriza la pasión por la escritura. En unos casos, publican novelas de éxito y se llaman Mario Vargas Llosa, Guillermo Cabrera Infante o Javier Cercas; en otros, el vínculo de estos vampiros con la literatura es un poco más lejano, como ocurre con satélites de la prensa del corazón o de las vísceras. Hablamos de Jimmy Giménez-Arnau o Boris Izaguirre.

Todos ellos -y así hasta medio centenar- pasan por las redes del diálogo con Valenzuela, que convierte el sentido del humor, la cultura y la perspicacia en técnica periodística

. Las entrevistas fueron publicadas en distintos periódicos entre 1999 y 2001. Quien haya disfrutado con clásicos de la entrevista a escritores como el fabuloso La linterna de Diógenes, de Alberto Guillén, está en su terreno. Y es que el libro de Valenzuela está llamado a ser uno de esos clásicos devorado por un grupo de lectores que aumenta con el paso de los años. Dentro de medio siglo se seguirá leyendo este libro porque por sus páginas corren torrentes de vida.

Las carcajadas de Cabrera Infante ante la pregunta de Valenzuela sobre sus vínculos con la aristocracia seguirán resonando a lo largo de los tiempos. Es elocuente la respuesta de Andrés Trapiello cuando Valenzuela le pregunta cuál es el mayor reproche o amenaza que ha recibido por sus diarios: "Ésta es la entrevista más rara que me han hecho jamás. Parece usted de la policía; o bien quiere que yo parezca del hampa". En fin, como decía el novelista Wenceslao Fernández Flórez: "No me haga víctima de ese 'timo de la entrevista', que consiste en cobrar lo que dicen los demás".