Insólita ministra de exteriores en Georgia
El presidente georgiano, Mijaíl Saakashvili, ha informado en una rueda de prensa que el pasado jueves pidió a la embajadora de Francia en Tblisi, Salomé Zurabishvili, que aceptase el cargo de ministra de Exteriores de Georgia. Es un nombramiento que ha sorprendido en Francia tanto como en Georgia. El presidente Saakashvili, tras señalar que cree que es un hecho sin precedentes en la historia de la diplomacia -ya que se supone que un diplomático debe mantenerse leal a su propio país y no aceptar cargos en gobiernos extrajeros- añadió que había consultado el tema con su homólogo fr...
El presidente georgiano, Mijaíl Saakashvili, ha informado en una rueda de prensa que el pasado jueves pidió a la embajadora de Francia en Tblisi, Salomé Zurabishvili, que aceptase el cargo de ministra de Exteriores de Georgia. Es un nombramiento que ha sorprendido en Francia tanto como en Georgia. El presidente Saakashvili, tras señalar que cree que es un hecho sin precedentes en la historia de la diplomacia -ya que se supone que un diplomático debe mantenerse leal a su propio país y no aceptar cargos en gobiernos extrajeros- añadió que había consultado el tema con su homólogo francés, el presidente Jacques Chirac, durante su visita a Francia hace un mes. Salomé Zurabishvili, de 51 años, a quien concederán la doble nacionalidad, es descendiente del escritor georgiano del siglo XIX Niko Nikoladze -su familia emigró a Francia en 1921, tras la revolución rusa- y es una diplomática de prestigio que ha tenido destinos en Roma, Washington, la ONU, la Unión Europea y la OTAN y en la Ssecretaría General de Seguridad Nacional de Francia antes de ocupar la Embajada de Georgia.