Del pop sosegado de Belle & Sebastian al 'soul' de Ljiljana Buttler
Al pop exquisito y sosegado de Belle & Sebastian se le llama "de culto" por no constar entre los grandes vendedores, pero sus incondicionales madrileños logran que llene dos días la sala Aqualung. No le andan lejos en planteamientos los neoyorquinos Fountains of Wayne, la otra visita importante de la semana al margen de la que protagoniza Ljiljana Buttler, que desde Bosnia Herzegovina trae la marca de ser considerada la madre del soul gitano.
- De tierras devastadas. A sus 60 años, Ljiljana Buttler pasa por ser considerada la gran dama de la canción gitana balcánica. Nacida en B...
Al pop exquisito y sosegado de Belle & Sebastian se le llama "de culto" por no constar entre los grandes vendedores, pero sus incondicionales madrileños logran que llene dos días la sala Aqualung. No le andan lejos en planteamientos los neoyorquinos Fountains of Wayne, la otra visita importante de la semana al margen de la que protagoniza Ljiljana Buttler, que desde Bosnia Herzegovina trae la marca de ser considerada la madre del soul gitano.
- De tierras devastadas. A sus 60 años, Ljiljana Buttler pasa por ser considerada la gran dama de la canción gitana balcánica. Nacida en Belgrado, es una de las grandes voces, con ese timbre casi masculino, de la Europa del Este, que no había logrado tener un disco editado en España hasta el reciente The mother of the gipsy soul. Enigmática y profunda, su canto expresa la desolación de una tierra devastada por la guerra que ha encontrado su acomodo en un concierto que comparte con el Mostar Sevdah Reunion, la agrupación que hace de la música tradicional bosnia, el sevdah, su seña de identidad.
- Mansedumbre pop. Belle & Sebastian, un grupo que aun con el marchamo "de culto" genera cientos de seguidores, viene a presentar Dear catastrophe waitres, un disco que, lejos de sus anteriores obras maestras, bien podría entrar en el calificativo de "pop de mesa camilla" que se dio en España a las bandas que surgieron en los noventa en la ciudad de San Sebastián. Es el pop tranquilo, exquisito y sosegado que también comparten los neoyorquinos Fountains of Wayne, que presentan ahora su disco Welcome interstae managers.
- Jazz de acordeón. El francés Richard Galliano elevó el acordeón a la categoría de instrumento para el jazz, y así se ha dado a conocer en el mundo marcando un antes y un después en el uso del instrumento. Le acompaña durante dos días su compatriota el saxofonista y clarinetista Michael Portal. Pero el jazz se abre en primavera al tradicional festival del San Juan Evangelista, que en su segunda semana de este año acoge al baterista español Guillermo McGuill. Fuera de él, destaca el saxofonista norteamericano Kenny Garret. El piano de Horacio Icasto acompaña la voz de Paloma Berganza y ambos llevan la canción francesa a los terrenos del jazz. Concha Buika, y su voz de origen guineano, se va hacia los estándares del género, mientras que Jatangozz abre otra vía al fusionar el jazz y el tango. El violín de Alasdair Fraser suena por fin en Galileo Galilei en compañía de Natalia Haas.
- Más de aquí. Las golondrinas etcétera se llama el nuevo disco de Josele Santiago, su debú tras la disolución de su grupo de siempre, Los Enemigos. Participa junto a Transportes Hernández y Sanjurjo, sugerente nombre tras el que se esconden los líderes de los grupos gallegos Siniestro Total y Os Diplomáticos, en el aniversario de la sala Moby Dick, al que también se suma la actuación de los lisérgicos catalanes Sidonie. Barricada, desde Navarra, estrena en Madrid su reciente disco, Hombre mata hombre, sin perder un ápice del brío que les empujó hace más de dos décadas al rock impetuoso y combativo.
Víctor Coyote, el cantante español que no se parece a nada ni a nadie, estrena Y yo que creo en el diablo, haciendo gala de una inteligencia fuera de los lugares más comunes del pop patrio. Con restos de Hechos Contra el Decoro, ya desaparecidos, se ha formado Deshechos, que con la clara intención de agitar conciencias, estrenan su propuesta basada en la agitación y el inconformismo. Fronteras se llama el nuevo disco de Cañamán, grabado en parte en Jamaica, que estrenan esta semana en Caracol.
- Canción y compromiso. Acude Lluís Llach al ciclo Cantando a la luz de la luna, que organiza el Ateneo Cultural Primero de Mayo de CC OO. Fátima Miranda, por segundo fin de semana, expone la ductilidad de sus cuerdas vocales al servicio del espectáculo Artesonado. Los cantautores Tontxu y Carlos Chaouen, recién llegados de Palestina, ofrecen conciertos con sus nuevas propuestas. La de Tontxu se llama Contacto con la realidad, un disco que se ha sufragado él mismo ya que la multinacional que produjo sus anteriores y reconocidos discos prefirió darle la carta de libertad. Además, el asturiano Nacho Vegas impone su universo particular en el café Ladinamo, un centro cultural alternativo. Más divertida resulta la aportación de Pepín Tre, que esta noche junta humor y música en Clamores.