Carteles obscenos de una estudiante

El mismo día en que se desató la virulenta pelea en el instituto Miguel de Cervantes, en la calle de Embajadores, la verja y las paredes de la fachada de otro instituto de Madrid, el de la Alameda de Osuna, amanecieron plagadas de carteles en los que se exhibían fotos de una alumna de 18 años en biquini, y, a su alrededor, frases groseras, vejatorias y obscenas.

La mayoría de los carteles estaban colgados en la verja exterior del centro. En ellos se identifica por su nombre a la alumna, y además figura el número de teléfono de su casa. Los responsables del instituto ordenaron retirarlos...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El mismo día en que se desató la virulenta pelea en el instituto Miguel de Cervantes, en la calle de Embajadores, la verja y las paredes de la fachada de otro instituto de Madrid, el de la Alameda de Osuna, amanecieron plagadas de carteles en los que se exhibían fotos de una alumna de 18 años en biquini, y, a su alrededor, frases groseras, vejatorias y obscenas.

La mayoría de los carteles estaban colgados en la verja exterior del centro. En ellos se identifica por su nombre a la alumna, y además figura el número de teléfono de su casa. Los responsables del instituto ordenaron retirarlos nada más llegar al centro, a la vez que pusieron los hechos en conocimiento de la policía y de la Consejería de Educación.

En los carteles, además de las frases groseras, se leía el teléfono de la alumna en biquini y de una amiga suya. Esto lleva a pensar, según un responsable educativo de la zona, que detrás de la cruel gamberrada pueda haber alguien con quien la estudiante mantuviera una relación de confianza y que por eso tuviera fotos suyas. Alumnos del centro tampoco descartan que detrás del caso haya un despecho amoroso.

El consejero de Educación, Luis Peral, considera que los brotes de violencia en los colegios e institutos son "minoritarios". "Vivimos en una sociedad con un exceso de violencia y eso tiene su reflejo en los centros educativos", añade y explica que se van a fijar "controles férreos" en las entradas y salidas de los institutos para evitar que a ellos accedan personas externas que puedan agredir a los alumnos.

"Vamos a aumentar la vigilancia en los recreos y a potenciar la acción tutorial", concluye Peral, quien afirma que ha pedido al delegado del Gobierno, Francisco Javier Ansuátegui, que refuerce la vigilancia policial alrededor de los centros.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En