IU rechaza entrar en el Pacto Antiterrorista porque sería masoquista

El coordinador general de Izquierda Unida rechazó ayer de plano la oferta del PP para entrar en el Pacto Antiterrorista: "No somos masoquistas. En ese pacto entras y luego te insultan, te agreden y te dicen que te tienes que mantener. ¡Eso que lo haga el PSOE!". Gaspar Llamazares ofreció una solución alternativa: "Yo le pido al PP que saque a ETA de la campaña, que no utilice sus comunicados para atacar a la oposición. Eso es lo que hay que hacer", sostuvo ayer en Alicante ante 1.200 personas.

Llamazares trata casi todos los días de desenmascarar a Mariano Rajoy, el candidato del PP. Le...

El coordinador general de Izquierda Unida rechazó ayer de plano la oferta del PP para entrar en el Pacto Antiterrorista: "No somos masoquistas. En ese pacto entras y luego te insultan, te agreden y te dicen que te tienes que mantener. ¡Eso que lo haga el PSOE!". Gaspar Llamazares ofreció una solución alternativa: "Yo le pido al PP que saque a ETA de la campaña, que no utilice sus comunicados para atacar a la oposición. Eso es lo que hay que hacer", sostuvo ayer en Alicante ante 1.200 personas.

Llamazares trata casi todos los días de desenmascarar a Mariano Rajoy, el candidato del PP. Le acusa de hacerse pasar por un "paracaidista", de simular que es simplemente el nuevo líder de su partido, olvidando que ha estado en el Gobierno en los últimos ocho años. Ese análisis sirve también para la lucha antiterrorista. Una persona que ha sido ministro del Interior, y responsable, según Llamazares, de dividir a las fuerzas políticas en la lucha contra ETA, no puede ahora pedir unidad, dijo tras conocer la propuesta.

Por la mañana, en Murcia, Llamazares hizo algo muy inusual en campaña electoral, que no hacen otros candidatos mayoritarios: enfrentarse directamente a un debate con sus electores. Acudió a la universidad, y respondió todas las preguntas, algunas comprometidas, que le hicieron los estudiantes, uno de los colectivos donde IU tiene más fuerza.

Él había hablado de trabajo precario y de la defensa de la universidad pública, pero los estudiantes le preguntaron por otras cosas. Querían saber por qué IU está en contra del Plan Hidrológico Nacional, que en Murcia tiene el viento a favor. De hecho, los resultados de IU en las municipales fueron allí especialmente desastrosos. Llamazares apostó por las desaladoras y el ahorro como solución a la sequía. También querían saber qué haría IU con el consumo de marihuana. "Legalización", respondió lacónico.

La sala, con unos 200 jóvenes que aplaudieron mucho a Llamazares, se calentó cuando un estudiante volvió a Lizarra, la sombra que persigue a IU, y le preguntó "por qué pactaron con Batasuna". Entre gritos de algunos compañeros, Llamazares logró calmar los ánimos con un tono profesoral: "En Lizarra intentamos hacer la tregua definitiva. Salió mal. Pero aprendimos muchas cosas, sobre todo que no se puede solucionar nada si no se entienden nacionalistas y no nacionalistas. Confiamos en que el Gobierno también aprendiera algo", dijo. A juzgar por la ovación que le despidió, convenció a la mayoría.

Sus asesores insisten en que Llamazares, aunque no tenga un gran magnetismo en los mítines, gana en las distancias cortas. Aunque su timidez y la ansiedad por llegar al siguiente acto, a la siguiente entrevista, por seguir su acelerada actividad, le juega a veces malas pasadas. El pasado domingo, en Valencia, un joven se le acercó. "Soy de Suecia", escuchó el líder. Llamazares, en medio del acoso de cientos de militantes, le espetó: "ah, sueco, ¿has leído a Henning Mankel?", un escritor de ese país que apasiona al coordinador. El chico dijo que no, sin entender bien de qué iba aquello, y se alejó extrañado. Lo que le había dicho es que era y es de Sueca, una localidad valenciana.