Reportaje:

Un hogar digital español en EE UU

La Politécnica de Madrid, único centro extranjero en un certamen de energía solar

Una vivienda familiar con espíritu mediterráneo, que se perciba en la luz y el color, y con un aire entre romano y andaluz, con su pequeño patio, su aljibe, su porche e integrada en la naturaleza, que dé la sensación de que sale del suelo. De esta idea parte el multidisciplinar equipo de una treintena de profesores y estudiantes de la Universidad Politécnica de Madrid que deberá construir dentro de 19 meses en cinco días una casa autosuficiente -que se alimente sólo con energía solar- en la explanada que hay enfrente del Capitolio (el National Mall), en Washington.

Es la única universid...

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Una vivienda familiar con espíritu mediterráneo, que se perciba en la luz y el color, y con un aire entre romano y andaluz, con su pequeño patio, su aljibe, su porche e integrada en la naturaleza, que dé la sensación de que sale del suelo. De esta idea parte el multidisciplinar equipo de una treintena de profesores y estudiantes de la Universidad Politécnica de Madrid que deberá construir dentro de 19 meses en cinco días una casa autosuficiente -que se alimente sólo con energía solar- en la explanada que hay enfrente del Capitolio (el National Mall), en Washington.

Es la única universidad no americana seleccionada (hay 18 estadounidenses y una canadiense) para participar en el certamen Solar Decathlon que se celebrará en septiembre de 2005. Es la segunda vez que se realiza y la primera que se abre a universidades extranjeras. Los requisitos exigen que les sobre además energía para alimentar un pequeño coche eléctrico con el que hacer cortos recorridos.

Crearán una vivienda unifamiliar con tecnología inteligente y que respete el medio ambiente

La cuenta atrás ha empezado y el equipo de la Politécnica de Madrid quiere ir mucho más lejos de lo que piden los organizadores, el Departamento de Energía de EE UU: harán una vivienda domoética. Es decir, será domótica (con sistemas de gestión que incluyan una tecnología inteligente) porque controlará que haya siempre en el interior la luz o la ventilación adecuada, y será ética porque, aparte de usar energía limpia, tendrá un diseño bioclimático, es decir, respetuoso con el medio ambiente, y hecho con materiales 100% reciclables.

La vivienda debe tener 42 metros cuadrados habitables sin contar el jardín (en el que planean montar un microclima). El diseño que presentarán será "muy europeo": "Esto se reflejará en los materiales (como la piedra, la tierra y la cerámica), el color y su vinculación con el exterior", explica Javier Neila, profesor de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura. "Habrá un pequeño patio con macetas de cubierta ecológica y plantas autóctonas que no precisen mantenimiento".

La piel del edificio será doble: aparte del cerramiento exterior habrá otro interior que no seguirá la línea de los muros sino que hará como una especie de ondas creando espacios utilizables. Las habitaciones serán movedizas. Es decir, podrán tener más o menos metros según las necesidades de los habitantes en cada momento. El tejado incluirá paneles fotovoltaicos (para captar la energía del sol y generar electricidad) y térmicos (para el agua caliente).

El equipo construirá la casa en el campus de Madrid para luego desmontarla y trasladarla a Washington. Debe incluir todos los electromésticos y una pequeña oficina. Los profesores han decidido que, aunque no es obligatorio, los decatletas que expongan la casa y pasen las 10 pruebas del certamen sean todos estudiantes. Tres de los elegidos son Silvia Martínez (ingeniero industrial, de 27 años) y Marcos Calvo (Teleco, de 30 años) y Carlos Bermejo (Arquitecto, de 30 años). Son alumnos de doctorado. La selección de la Politécnica de Madrid no es casual. Su Instituto de Energía Solar es puntero en el mundo. La empresa Isofotón (que se dedica a la construcción de paneles solares), reconocida internacionalmente, nació en este instituto.

Los siete ilusionados profesores quieren dar "visibilidad" a las posibilidades de la energía solar dentro y fuera de la Politécnica. De momento cuentan con un patrocinador, Isofotón, que financiará alrededor del 10% de los 2,5 millones de euros que les costará el proyecto. "No vamos a hacer una casa tecnológicamente complicada, queremos que no necesite manual", resalta Miguel Ángel Egido, del Instituto de Energía Solar. "Se trata de crear un hogar digital que tome decisiones sobre el encedido de luces o el control de la humedad, pero sin que sus habitantes se den cuenta", añade Javier Jiménez, del Centro de Domótica Integral.Y, tras el concurso, instalarán una réplica de forma permanente en medio del campus.

Boceto conceptual, realizado para EL PAÍS, de la casa que presentará el equipo español en EE UU.CARLOS BERMEJO

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