Casas virtuales

Antes de Navidad apareció en esta misma sección una carta destapando la situación en la que nos encontramos los futuros propietarios de la urbanización Valle de Bartodano-Aben Humeya, en el municipio de Jun.

Ya entonces sabíamos que no teníamos luz, agua, gas, ni conexión a la red de saneamiento. Ahora, tres meses más tarde, después de habernos constituido como gestora de afectados y habernos reunido con los promotores y con el Ayuntamiento, nos hemos enterado de algunas sorpresas: servidumbres de paso de la red de saneamiento, lo que significa que los darros de unos vecinos pasan por l...

Antes de Navidad apareció en esta misma sección una carta destapando la situación en la que nos encontramos los futuros propietarios de la urbanización Valle de Bartodano-Aben Humeya, en el municipio de Jun.

Ya entonces sabíamos que no teníamos luz, agua, gas, ni conexión a la red de saneamiento. Ahora, tres meses más tarde, después de habernos constituido como gestora de afectados y habernos reunido con los promotores y con el Ayuntamiento, nos hemos enterado de algunas sorpresas: servidumbres de paso de la red de saneamiento, lo que significa que los darros de unos vecinos pasan por las parcelas de otros; inexistencia de las acometidas a las casas desde la red de agua potable; además, según consta en el Registro de la Propiedad, el Ayuntamiento ha gravado las casas con una afección por gastos de la urbanización.

Pasamos a detallar las soluciones que se nos han dado desde el Ayuntamiento para arreglar este desaguisado. El primer teniente de alcalde nos dijo, en reunión celebrada el día 6 de febrero, que en el depósito de la urbanización ya hay agua, que podrá llegar a nuestras casas cuando se hagan las acometidas. En cuanto a la red de saneamiento, hasta tanto se pueda conectar a la red general, afirmó que se tenía permiso provisional de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir para verter las aguas residuales al cauce del río que pasa por urbanizaciones como Los Morquiles.

Finalmente, el citado edil nos manifestó su sorpresa ante nuestra falta de entusiasmo con sus soluciones. Claro que no nos parece, en el siglo XXI, lógico tener que felicitar al primer teniente de alcalde por casi tener agua potable. En resumen, sin casa y con muchos problemas.