Cartas al director

Esperanza para los diabéticos

Acabo de leer un artículo de Denise L. Faustman y su equipo de trabajo en la revista Science (14 de noviembre). Describen cómo han conseguido curar de su diabetes a ratones autoinmunes, por tanto con una diabetes parecida a la humana. Células del bazo de ratones reeducaron el sistema inmunitario de ratones enfermos. Y en el páncreas de éstos aparecieron células productoras de insulina generadas a partir de células troncales adultas inyectadas.

Sé que muchos diabéticos se alegrarán con esta noticia. Abre una puerta de esperanza. Aunque habrá que confirmar que lo que pasa en los ra...

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Acabo de leer un artículo de Denise L. Faustman y su equipo de trabajo en la revista Science (14 de noviembre). Describen cómo han conseguido curar de su diabetes a ratones autoinmunes, por tanto con una diabetes parecida a la humana. Células del bazo de ratones reeducaron el sistema inmunitario de ratones enfermos. Y en el páncreas de éstos aparecieron células productoras de insulina generadas a partir de células troncales adultas inyectadas.

Sé que muchos diabéticos se alegrarán con esta noticia. Abre una puerta de esperanza. Aunque habrá que confirmar que lo que pasa en los ratones pasa también en la persona diabética, si se usan células troncales adultas semejantes. Algunos, tal vez, seguirán pensando en las células madre embrionarias.

Deben saber, sin embargo, que esta esperanza se basa en el anuncio de una curación de ratones con una diabetes distinta a la humana. Y que el sistema inmunitario de estos ratones no atacaba las células del propio páncreas.

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Y deben saber, además, que las células madre embrionarias, que inyectaron los responsables de esta investigación se habían tragado la insulina del medio de cultivo... y que después la devolvían.

Me parece que en este momento es más acertado que un científico mire con atención las células troncales del adulto y se olvide de las embrionarias.

Quien vocee lo contrario debe usar argumentos científicos, y dejar a un lado los sentimentales. Los diabéticos se merecen toda nuestra atención.

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