Polémica entre ecologistas y ERC por el trazado de la carretera N-II en Tordera
El grupo medioambientalista Plataforma Salvem Jalpí exige a Esquerra Republicana (ERC) que defina su posición sobre el trazado del desdoblamiento de la carretera Nacional II a su paso por Tordera. El trazado de la carretera trocea zonas agrícolas como el Pla de Jalpí, el de Sant Daniel y el de Vall de Maria y afecta a Mas Mora.
Salvem Jalpí está impulsada por el grupo ecologista Asociación Naturalista de Girona e incluye al sindicato agrícola Unió de Pagesos y a todos los partidos políticos representados en el consistorio de Tordera, así como a las entidades civiles de esta localidad. ...
El grupo medioambientalista Plataforma Salvem Jalpí exige a Esquerra Republicana (ERC) que defina su posición sobre el trazado del desdoblamiento de la carretera Nacional II a su paso por Tordera. El trazado de la carretera trocea zonas agrícolas como el Pla de Jalpí, el de Sant Daniel y el de Vall de Maria y afecta a Mas Mora.
Salvem Jalpí está impulsada por el grupo ecologista Asociación Naturalista de Girona e incluye al sindicato agrícola Unió de Pagesos y a todos los partidos políticos representados en el consistorio de Tordera, así como a las entidades civiles de esta localidad. Salvem Jalpí ha estado luchando durante siete años para reducir los impactos que la nueva infraestructura pueda tener para el suelo agrícola afectado. Tras conseguir el apoyo del municipio vecino de Blanes, logró el compromiso del Ministerio de Fomento y la Generalitat de dibujar un corredor único para la carretera y la futura vía de acceso a Lloret de Mar. Pero el consenso se rompió con la entrada de ERC en el equipo de gobierno de Blanes, que exigió que se revocase el pacto con Tordera y presentó otra alternativa.
Ahora, los republicanos barceloneses y gerundenses se hallan divididos y han adoptado una postura ambigua que ha molestado tanto a la Plataforma Salvem Jalpí que el ex dirigente de Unió de Pagesos, Pep Riera, retiró el apoyo al candidato de ERC al Parlament, Josep Lluís Carod.
El trazado consensuado por la plataforma es parecido a una de las opciones aceptadas por Fomento, con un corredor único para el desdoblamiento y la prolongación de la C-32, que llegaría hasta Blanes. Según el mismo trazado acordado inicialmente, en Blanes se produciría una bifurcación para que la N-II llegara a Maçanet de la Selva y para crear una carretera de acceso a Lloret. Es decir, que con un solo corredor se solventaría la creación de nuevas infraestructuras. Esta alternativa pareció la menos agresiva para un municipio que carga con una gran densidad de tráfico y contó con la aceptación del Ayuntamiento de Blanes.
Viraje
Sin embargo, la entrada de ERC en el nuevo equipo de gobierno de Blanes supuso un viraje en la marcha de esta iniciativa de consenso. Su primer concejal, Joan Puig, hizo revocar el acuerdo y, ahora, la división de ERC resulta así de clara: el grupo del Maresme apoya a la agrupación mediambientalista de Tordera, mientras que en Girona, ERC muestra una posición ambigua a favor del edil de Blanes.
La posición de los republicanos es contradictoria. Desde el Maresme, apoyan la posición de Tordera, mientras que desde la federación gerundense, los republicanos reducen el conflicto a una cuestión local en la que dos ayuntamientos tienen posiciones distintas. Sin embargo, los grupos del PSC y ICV-EUiA de Blanes, socios de gobierno de ERC, ya se han manifestado abiertamente como partidarios de la opción que plantea la Plataforma Salvem Jalpí, siempre que el acceso a Lloret sea una carretera sin peajes ni accesos para no favorecer la especulación del territorio. ERC mantiene que el debate se posponga hasta después de conocerse los resultados de los comicios celebrados ayer, una postura que, a medida que avanzaba el tiempo, ha enconado más la oposición del resto de grupos.