Coves pide que Aznar solucione los problemas ecológicos que causa el Peñón

La consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, exigió ayer al presidente del Gobierno, José María Aznar, que solucione el problema medioambiental que genera Gibraltar al quedar exento del cumplimiento de las normativas europeas, según una sentencia emitida por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea.

Una sentencia del tribunal europeo exime a Gibraltar del cumplimiento de las directivas sobre la libre circulación de mercancías por ser el Peñón un terreno excluido de los límites aduaneros comunitarios. Esta sentencia, a juicio de los ecologistas, favorece las operaciones de carga y...

La consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, exigió ayer al presidente del Gobierno, José María Aznar, que solucione el problema medioambiental que genera Gibraltar al quedar exento del cumplimiento de las normativas europeas, según una sentencia emitida por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea.

Una sentencia del tribunal europeo exime a Gibraltar del cumplimiento de las directivas sobre la libre circulación de mercancías por ser el Peñón un terreno excluido de los límites aduaneros comunitarios. Esta sentencia, a juicio de los ecologistas, favorece las operaciones de carga y descarga de combustible que actualmente se realizan entre petroleros en aguas de la bahía de Algeciras, frente al fondeadero del Peñón.

El Tribunal de Justicia de la UE desestimó en su fallo la denuncia presentada por la Comisión y el Gobierno español, en la que se reclamaba la aplicación de 14 directivas comunitarias en Gibraltar.

Ante esta situación, Fuensanta Coves quiso dejar claro que "la no aplicación de las normativas medioambientales por parte de las autoridades de la colonia británica suponen un peligro para la zona". Coves exigió al presidente del Gobierno una respuesta inmediata. "Aznar tiene el deber moral y político de exigirle al primer ministro británico, Tony Blair, durante el encuentro que van a mantener próximamente; que se cumplan en Gibraltar las normativas medioambientales, a pesar de esta sentencia y al margen del estado de las conversaciones sobre la soberanía", afirmó Coves.

Para la consejera, "la sentencia cierra un camino en las intenciones de la Junta de Andalucía de llevar a cabo acciones judiciales contra Gibraltar por el incumplimiento de 11 normativas medioambientales exigidas por la UE, al margen de las operaciones de bunkering [abastecimiento de combustible en alta mar]".

Los ecologistas de Greenpeace denunciaron ayer el incremento de petroleros monocasco, o "buques basura", como los denominaron, en aguas próximas a Gibraltar. Los conservacionistas exigieron al Gobierno español una actuación inmediata.

"Los intereses económicos detrás del negocio de los petroleros basura se han impuesto a la política de prevención de desastres ambientales, por lo que esta sentencia del tribunal europeo supone una alerta roja para las costas andaluzas", manifestó Juan López de Uralde, director ejecutivo de Greenpeace España.

El portavoz de Verdemar-Ecologistas en Acción, Antonio Muñoz, denunció además que el petrolero Wilminton, que relevó al Vemamagna como "gasolinera flotante" en aguas próximas a Gibraltar, se encuentra cada vez más cerca de la playa de Campamento, en San Roque, por lo que pidió a las autoridades españolas "que tomen cartas en el asunto, por el riesgo que supone la proximidad de un barco que realiza operaciones de carga y descarga con cien mil toneladas de fuel a bordo".

De momento el Wilminton se encuentra fondeado en la Bahía de Algeciras con el único objetivo de abastecer a otros buques a su paso por el estrecho de Gibraltar, evitando así todo tipo de controles de seguridad por parte de las autoridades españolas que, a pocos metros, obligan a los buques que fondean en el puerto de Algeciras a cumplir las directivas de la Unión Europea.

La sentencia del Tribunal de Justicia de la UE en la que, según apuntó, reconoce que en el momento de la adhesión de Gran Bretaña, Dinamarca e Irlanda a la Unión Europea, se excluye a Gibraltar y se respeta la situación que tenía con anterioridad. Éste es el argumento, según dijo la consejera, que exime al Peñón del cumplimiento de las directivas europeas. No obstante, Fuensanta Coves destacó un párrafo de dicha sentencia en el que el Tribunal Europeo asegura que la no aplicación de estas directivas puede poner en peligro la coherencia de otras políticas comunitarias como la protección del medio ambiente. A juicio de la consejera, la propia sentencia "entiende y comprende que la situación de Gibraltar es anómala y, es más, dice que hay un riesgo, un peligro".

Coves recordó que el Consejo de Gobierno aprobó el martes el plan de coordinación de vertidos al litoral. En este sentido, aseguró: "Andalucía tiene las tareas hechas, hacemos todo lo que está en nuestra mano, nos falta el apoyo del Gobierno central para resolver el problema que tenemos entre manos".

Por otra parte, la consejera informó en Algeciras (Cádiz) de que la Junta de Andalucía sólo ha detectado un nivel superior en dos agentes contaminantes en 2002 en el Campo de Gibraltar. Se trata, según dijo, de dióxido de carbono y ozono, durante un día en Los Barrios; 37, en San Roque; y 49, en La Línea. Coves facilitó estos datos en la inauguración de un panel informativo en Algeciras que registrará la calidad del aire.