Sólo un 75% de los conductores previstos por el Gobierno regional usa la M-45

Las previsiones de la Comunidad de Madrid de que por la M-45 (Leganés-San Fernando de Henares) circularan unos 100.000 coches al día están algo alejadas de la realidad. Según datos del Gobierno regional, unos 75.000 vehículos utilizan de media y a diario esta vía de 37 kilómetros de longitud y financiada con peaje en la sombra (la Comunidad paga a la empresa constructora en función del número de usuarios durante un periodo de 25 años). La otra vía con esta fórmula, la M-501 o carretera de los pantanos, cuenta con un aforo medio de unos 35.000 vehículos.

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Las previsiones de la Comunidad de Madrid de que por la M-45 (Leganés-San Fernando de Henares) circularan unos 100.000 coches al día están algo alejadas de la realidad. Según datos del Gobierno regional, unos 75.000 vehículos utilizan de media y a diario esta vía de 37 kilómetros de longitud y financiada con peaje en la sombra (la Comunidad paga a la empresa constructora en función del número de usuarios durante un periodo de 25 años). La otra vía con esta fórmula, la M-501 o carretera de los pantanos, cuenta con un aforo medio de unos 35.000 vehículos.

La M-45 discurre por San Fernando de Henares, Rivas-Vaciamadrid, Coslada, Getafe, Leganés y los distritos madrileños de Vicálvaro, Vallecas, Villaverde y Carabanchel. Fue inaugurada por el príncipe Felipe de Borbón el 14 de marzo de 2002, después de tres años de obras y una inversión de 526 millones de euros. La construcción se financió por el sistema de peaje en la sombra: las seis empresas adjudicatarias sufragaron todos los gastos y, a cambio, reciben cada año un canon que paga el Gobierno regional en función del número de vehículos que circulen al día.

Unos sensores colocados en el asfalto han permitido contabilizar que a diario la han utilizado unos 75.000 vehículos, una cifra que queda a bastante distancia de las pretensiones iniciales del Gobierno regional (100.000 vehículos). Eso sí, los niveles de seguridad y de velocidad se mantienen en altas cotas. Los vehículos suelen superar la media de 100 kilómetros por hora y prácticamente no se han registrado accidentes graves en los 37 kilómetros de su trazado. Este hecho también favorece a las adjudicatarias, ya que el contrato de concesión incluye penalizaciones en caso de que la siniestralidad se dispare.

Más usuarios en el sur

El número de usuarios crece conforme se acercan a la zona sur. De esta forma, el primer tramo, que transcurre entre la autovía de Barcelona (N-II) y el eje de O'Donnell, es utilizado por unos 52.000 vehículos al día. Por el segundo tramo (eje de O'Donnell-autovía de Andalucía) han rodado diariamente unos 75.000 vehículos desde el pasado mes de febrero, según los datos facilitados por el Gobierno regional.

El tercer y último tramo es el más utilizado. De hecho, une dos de las autovías de salida más utilizadas en la región: la de Andalucía (N-IV) y la de Extremadura (N-V), esta última a través de la carretera de circunvalación M-40. Además, está situado entre los municipios más poblados de la periferia de la capital. En los primeros días de este mes de septiembre han pasado por esta zona cerca de 98.000 vehículos. Durante el mes de agosto, con las consiguientes vacaciones de muchos madrileños, estas cifras han sufrido un considerable descenso.

La Comunidad de Madrid reservó una partida de 52 millones de euros en los presupuestos de este año para pagar los peajes de la M-45 y de la M-501, conocida como carretera de los pantanos. Fuentes del Gobierno regional cifraron el año pasado en unos 75 céntimos el desembolso medio que debería hacer la Consejería de Obras Públicas por cada coche que entrase en la M-45. Ahí se tiene en cuenta el tramo recorrido, el volumen del vehículo o el nivel de congestión de la autovía, entre otras variables.

Este primer balance supone, por tanto, que la Comunidad tendrá que ingresar en las arcas de las constructoras unos 56.250 euros al día, es decir, 20,5 millones de euros al año. Si se cumplen las previsiones, el Gobierno se ahorrará parte de los 52 millones reservados para el pago de peajes en la sombra.

La otra carretera que se financia con ese sistema, la M-501, ha tenido un aforo medio de 34.842 coches. En este caso se trata de casi 22 kilómetros de vía que transcurren entre la conexión con la M-40 y el término municipal de Brunete. Las empresas adjudicatarias consiguieron el concurso a través de una unión temporal de empresas formada por una alianza de Dragados, Necso, FCC y Cajamadrid. El periodo de concesión también es de 25 años. La velocidad media alcanzada por los conductores supera los 110 kilómetros por hora, según el Gobierno regional.