Maragall quiere que la Diada se convierta en "una celebración del país y no de los partidos"
El líder del PSC critica el cariz que ha adquirido la ofrenda al monumento de Casanova
Pasqual Maragall, el candidato del Partit dels Socialistes (PSC) a la presidencia de la Generalitat, dio a entender ayer que uno de los motivos por los que no estará en la ceremonia del 11 de septiembre, que se celebrará el próximo jueves ante el monumento de Rafael Casanova de Barcelona, es que este acto se ha convertido en "un desfile de partidos políticos para que un grupo de jóvenes vaya allí a aplaudir a unos, a silbar a otros y también a amenazar a otros". Maragall defendió que la Diada se convierta en "una celebración del país y no de los partidos".
El líder ...
Pasqual Maragall, el candidato del Partit dels Socialistes (PSC) a la presidencia de la Generalitat, dio a entender ayer que uno de los motivos por los que no estará en la ceremonia del 11 de septiembre, que se celebrará el próximo jueves ante el monumento de Rafael Casanova de Barcelona, es que este acto se ha convertido en "un desfile de partidos políticos para que un grupo de jóvenes vaya allí a aplaudir a unos, a silbar a otros y también a amenazar a otros". Maragall defendió que la Diada se convierta en "una celebración del país y no de los partidos".
El líder socialista asegura que muchos recuerdan con dolor una ocasión en que "se amenazó a unos y después los mataron", en referencia a la ola de atentados del comando Barcelona de ETA en 2000. Maragall añadió: "Les dijeron: concejales del PP, pim, pam, pum. Y al cabo de un mes mataron a uno en Sant Adrià de Besòs (Barcelonès) y al cabo de dos a otro en Viladecavalls (Vallès Occidental). Pues bien, esto se ha acabado", subrayó.
El año pasado Maragall ya dejó claro su agotamiento con el formato de este acto y sugirió una fórmula unitaria. A lo largo de la mañana, partidos, asociaciones e instituciones desfilan para hacer una ofrenda floral al monumento a Casanova y la orquesta va interpretando Els Segadors una vez tras otra. En ocasiones -y muy particularmente cuando llega el turno del PP- el himno queda ahogado por los silbidos de los grupos nacionalistas concentrados. Maragall insistió ayer en que correspondería al Parlament replantear los actos de la Diada y darle un sentido unitario.
Respecto al viaje que tiene previsto realizar a Santiago de Chile justamente durante la Diada, Maragall argumentó que deseaba estar al lado de los catalanes de América Latina y también que está convencido de que Cataluña, "haciéndose fuerte en su desgracia", puede convertirse en "uno de los tres referentes de las desgracias del mundo", poniendo el 11 de septiembre catalán junto al asalto al palacio de la Moneda de Chile y al ataque contra las Torres Gemelas de Nueva York.
El diputado Joaquim Nadal, portavoz socialista en el Parlament, explicó después que los socialistas realizarían, como cada año, la ofrenda floral a Casanova. Nadal estará en ese acto junto con Josep Montilla.
El líder socialista insistió, en un parlamento celebrado en el Casal de Maià de Montcal (Garrotxa), en su idea de vertebrar un catalanismo "popular, progresista y de izquierdas" que "ya no será el oficial, sino el de todos". En su opinión, ha llegado el momento de buscar las raíces plurales del catalanismo, aceptando a la inmigración. "Hemos pasado por un canal estrecho, pero ahora es la hora de dejarlo florecer", ilustró.
El mandatario socialista, junto a Joaquim Nadal, realizó ayer un viaje por escenarios de Jacint Verdaguer, Joan Maragall y Ernest Lluch: la ermita de la Mare de Déu del Món, el pueblo de Maià de Montcal -donde reposan los restos del político socialista- y Olot.