OPINIÓN DEL LECTOR

Noelia

Hace unos meses, escribía una carta en la que intentaba mostrar toda mi indignación hacia el trato que nos habían dado en la discoteca Antique. Como decía entonces, los porteros del local "se toparon con nueve publicistas". Hoy, dos meses más tarde, ya no somos nueve sino ocho, nuestras prioridades en la vida han cambiado en un solo fin de semana y la indignación que queremos plasmar en este papel no tiene nada que ver con la diversión. Noelia, una de esas publicistas, ya no estará nunca más con nosotras, nunca más compartirá nuestras reuniones semanales y nunca más podrán impedirle la ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Hace unos meses, escribía una carta en la que intentaba mostrar toda mi indignación hacia el trato que nos habían dado en la discoteca Antique. Como decía entonces, los porteros del local "se toparon con nueve publicistas". Hoy, dos meses más tarde, ya no somos nueve sino ocho, nuestras prioridades en la vida han cambiado en un solo fin de semana y la indignación que queremos plasmar en este papel no tiene nada que ver con la diversión. Noelia, una de esas publicistas, ya no estará nunca más con nosotras, nunca más compartirá nuestras reuniones semanales y nunca más podrán impedirle la entrada en ningún local glamouroso.

Un conductor desconsiderado y aún anónimo decidió arrollarla la noche del sábado en la calle Torneo, mientras al parecer realizaba una especie de competición con otro vehículo, y ni siquiera quiso pararse para saber qué había ocurrido, quizás preso del pánico (no quiero pensar que fuera para no perder la carrera). Su familia y nosotras, sus amigas, deseamos con todas nuestras fuerzas que se logre localizar al causante de una muerte absolutamente injusta y dolorosa, y que pague por lo que hizo y por su cobardía.

A nosotras ya nadie podrá devolvernos a Noe, una persona que amaba profundamente la vida, positiva al máximo, que nunca veía donde estaba el problema y si lo había siempre creía en una solución, llena de planes de futuro, humilde, sincera, solidaria, creyente...amante de cualquier cosa. Ya nunca disfrutaremos de su alegría, de su risa permanente, de su locura, de su arte capaz de animar al más desgraciado.

No entendemos por qué te ha tenido que tocar a ti, y precisamente ahora, que acababas de encontrar un trabajo de "lo tuyo" y que todo parecía sonreírte. Aquella tarde no pudimos despedirnos, pero bueno, habría otra comida pronto. Hoy nos lamentamos de no haberlo hecho por eso queremos dedicarle estas palabras. Te queremos mucho, Noe.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En