Las entrevistas en euskera de 'Argia' reciben el premio Rikardo Arregi

Las hermanas Estitxu e Ixiar Eizagirre recibieron ayer el premio Rikardo Arregi de periodismo en euskera, organizado por el Ayuntamiento de Andoain y dotado con 6.000 euros, por la serie de entrevistas publicadas en el semanario Argia. El premio Periodista Novel -2.400 euros- recayó en el bertsolari Amets Arzalluz, por sus originales colaboraciones en el programa Goizean behin, de Euskadi Irratia.

La ceremonia de entrega de los decimoquintos Premios Rikardo Arregi estuvo presidida por el alcalde de la localidad, el socialista José Antonio Pérez Gabarain. En e...

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Las hermanas Estitxu e Ixiar Eizagirre recibieron ayer el premio Rikardo Arregi de periodismo en euskera, organizado por el Ayuntamiento de Andoain y dotado con 6.000 euros, por la serie de entrevistas publicadas en el semanario Argia. El premio Periodista Novel -2.400 euros- recayó en el bertsolari Amets Arzalluz, por sus originales colaboraciones en el programa Goizean behin, de Euskadi Irratia.

La ceremonia de entrega de los decimoquintos Premios Rikardo Arregi estuvo presidida por el alcalde de la localidad, el socialista José Antonio Pérez Gabarain. En el acto se otorgó una mención de honor a los tres diarios escritos íntegramente en lengua vasca a lo largo de la historia y ya desaparecidos: Eguna, Euskaldunon Egunkaria y Egunero. Esta distinción fue otorgada por su labor en favor del euskera en circunstancias adversas. Los premios fueron recibidos por la hija de Augustin Zubikarai, responsable de Eguna durante la Guerra Civil; Joan Mari Torrealdai, directivo del clausurado Egunkaria, y Eneko Bidegain, director de Egunero.

La periodista Leire Kortabarria, que trabaja en el semanario Goienkaria, editado en la comarca guipuzcoana del Alto Deba, logró la mención especial del jurado por publicar la noticia de que el actor William Petersen, quien encarna al personaje de Grissom, el jefe del equipo investigador de la serie televisiva C.S.I., vivió algunos años en la localidad de Oñati, donde precisamente descubrió su vocación interpretativa.

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