Pocos avances en la reunión de ayer para formar Gobierno entre PSOE e IU

Las negociaciones entre PSOE e IU para formar un Gobierno sólido y estable para la Comunidad de Madrid han bajado su ritmo; así lo reconocen ambos partidos. Según fuentes socialistas y de Izquierda Unida, diferencias de criterio en materias de urbanismo y políticas sociales son los ejes centrales de esta ralentización. Sin embargo, ambas partes también confirman que la "transversalidad entre consejerías [nombramiento de futuros cargos en el Gobierno] y cuestiones conceptuales [los programas electorales]" originan las diferencias.

Tanto representantes del PSOE como de Izquierda Unida est...

Las negociaciones entre PSOE e IU para formar un Gobierno sólido y estable para la Comunidad de Madrid han bajado su ritmo; así lo reconocen ambos partidos. Según fuentes socialistas y de Izquierda Unida, diferencias de criterio en materias de urbanismo y políticas sociales son los ejes centrales de esta ralentización. Sin embargo, ambas partes también confirman que la "transversalidad entre consejerías [nombramiento de futuros cargos en el Gobierno] y cuestiones conceptuales [los programas electorales]" originan las diferencias.

Tanto representantes del PSOE como de Izquierda Unida están convencidos de que antes del próximo día 10 se llegará a un acuerdo para que la izquierda pueda gobernar de forma estable la Comunidad de Madrid. Queda poco tiempo, seis días, y fuentes de ambos partidos reconocieron ayer que las conversaciones para formar este futuro Ejecutivo se han ralentizado, aunque no parado.

Según fuentes socialistas, "las diferencias de criterio en cómo afrontar las políticas en temas como el urbanismo y asuntos sociales centran las diferencias fundamentales". Estas fuentes reconocen que "globalmente las posturas son similares en ambos partidos, pero existen matices que es mejor hablar antes para evitar que surjan las tensiones una vez que se haya llegado a un acuerdo".

Representantes del PSOE han asegurado que los dos partidos "tienen una obligación con sus bases de entenderse y llegar a un acuerdo, pero siempre dentro de los límites de los programas que han respaldado esas mismas bases".

Otras fuentes del PSOE aseguran que la sintonía programática de ambos partidos no es el centro de las negociaciones; que, aunque puedan existir matices, ambas formaciones tienen una forma muy similar de entender la política y centran el grueso de las negociaciones en el reparto de responsabilidades dentro del futuro Gobierno de la Comunidad.

Puestos de responsabilidad

En este sentido, fuentes del PSOE aseguran que al haber tenido más respaldo en las urnas es lógico que sean los socialistas los que tengan mayores puestos de responsabilidad que Izquierda Unida". Sin embargo, estos representantes del PSOE destacan que el hecho de que el coordinador de Izquierda Unida haya expresado su petición de convertirse en vicepresidente del Gobierno regional "no es un elemento que impida un acuerdo de Gobierno". Aseguran que las conversaciones "se centran más en diferencias de criterio que en la asignación de cargos".

Estas diferencias de criterio se concretan, según fuentes de Izquierda Unida, "en la necesidad de encontrar un punto de transversalidad y de conceptos a la hora de elaborar un gobierno progresista". Según estas fuentes, no sólo es necesario debatir sobre quiénes ocuparán las consejerías y direcciones generales, sino "cómo se debe de gobernar e integrar los programas electorales de ambos partidos". Representantes de IU afirmaron que las negociaciones "no se han detenido, pero que se encuentran en una fase difícil en la que es necesario reflexionar para conseguir el mejor de los acuerdos". Tanto PSOE como IU reconocen que han pedido a los representantes de la mesa de negociación confidencialidad para evitar filtraciones.

Fausto Fernández expresó ayer su deseo de que los diputados de su partido no ocupen a la vez un escaño y un alto cargo dentro del Gobierno. "Debido al elevado volumen de trabajo que cada puesto acarrea, sería aconsejable que los diputados no asumiesen también otras funciones que requirieran una jornada laboral completa". El deseo de Fernández llevado a la realidad significaría que los parlamentarios de IU no podrán desempeñar funciones ni de consejero -como ya se había anunciado-, ni de viceconsejero, ni de director general. Sin embargo, Fernández detalló que "no hay que ser tajante" al respecto.

Rafael Simancas, futuro presidente regional (PSOE), aseguró que considera "legítimo" que IU plantee sus solicitudes y afirmó que ambas formaciones negocian sobre la base de las líneas generales programáticas y una distribución "razonable" de las responsabilidades. Añadió que las conversaciones "marchan razonablemente" y que en unos días se habrá concluido un acuerdo de Gobierno.