Diabéticos en el metro

Según Metro, una persona diabética no puede atender ni tan siquiera una petición tan sencilla como la del título. Miguel Ángel, 28 años y en paro, inscrito en el Inem, fue requerido para presentarse a unas pruebas para agente de taquilla. Tras realizar las pruebas y quedar el número 25 de los 70 que se necesitaban, fue rechazado por su diabetes.

Los diabéticos estamos hartos de que se vea en nosotros a personas incapaces, ¡les recuerdo que hay medallistas olímpicos diabéticos! Sin ir más lejos, entre nuestros gobernantes, por la media de edad que tienen, seguramente hay más de un diabét...

Según Metro, una persona diabética no puede atender ni tan siquiera una petición tan sencilla como la del título. Miguel Ángel, 28 años y en paro, inscrito en el Inem, fue requerido para presentarse a unas pruebas para agente de taquilla. Tras realizar las pruebas y quedar el número 25 de los 70 que se necesitaban, fue rechazado por su diabetes.

Los diabéticos estamos hartos de que se vea en nosotros a personas incapaces, ¡les recuerdo que hay medallistas olímpicos diabéticos! Sin ir más lejos, entre nuestros gobernantes, por la media de edad que tienen, seguramente hay más de un diabético. ¿Y qué hacen para evitar estas discriminaciones? ¡Nada!

Por último, Miguel Ángel solicitó su expediente, así como que se pusiesen por escrito los motivos por los que era rechazado. ¡Una vez más no le hicieron ningún caso! Incluso se atrevieron a recibirnos para decirnos que no lo iban a poner por escrito. ¿Dónde quedan nuestros derechos?

Por todo esto, Miguel Ángel y la Asociación de Diabéticos Ademadrid solicitan la ayuda de los medios de comunicación para pedir públicamente ser atendidos por Manuel Melis, presidente de Metro, o por el consejero de Obras Públicas, Urbanismo y Transporte, Luis Eduardo Cortés, y así poder recibir unas explicaciones más convincentes.